El secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubón, aseguró que él cumplió con su deber cuando se ejecutó la construcción de la Línea 12 (L-12) del Metro de Ciudad de México (CDMX). Esto ante el inicio de las imputaciones a funcionarios y empresas derivado de las investigaciones del colapso del tramo de la estación Olivos y la tragedia que provocó.

Desde Palacio Nacional, Marcelo Ebrard dijo que como jefe de Gobierno del entonces Distrito Federal (DF) era difícil que se diera cuenta que los constructores pusieron mal los pernos que daban estabilidad al tramo elevado de la L-12. Declaró que para eso se creó un organismo grande llamado ‘Proyecto Metro’, el cual tenía autonomía técnica y financiera; en tanto, sostuvo que también de esto estaba encargado el consorcio formado por ICA, Carso y Alstom.

El canciller consideró que él cumplió con su deber en el momento de la construcción de la también conocida como ‘Línea Dorada’, pues gestionó la participación de personajes como el Premio de Ingeniería Ciudad de México 2019, Alejandro Vázquez Vera, como supervisor de la construcción y de institutos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y el Instituto Politécnico Nacional (IPN).

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«[También hubieron] empresas conocidas y certificación de los grupos más importantes», comentó el secretario.

Marcelo Ebrard insistió en que él actuó profesionalmente durante la edificación de la L-12 y de manera íntegra, motivo por el cual está «dando la cara». En tanto, comentó que los imputados seguramente presentarán sus defensas, pero advirtió que muchos ya pasaron procesos judiciales durante el sexenio de Miguel Ángel Mancera.

«Hubo 134 causas, el gobierno de la Ciudad perdió 124 y de los mencionados todos o casi todos ganaron muchísimos casos», dijo. Finalmente, expresó que conforme avancen las pesquisas y los procesos judiciales él dará su opinión fundada, considerando que al momento se puede partir de la base de que la Fiscalía General de Justicia de Ciudad de México (FGJCDMX) hace un trabajo profesional.

El último comentario del canciller fue una referencia a lo dicho por el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) minutos antes, cuando aseguró que la FGJCDMX no está intentando proteger a nadie, ni tampoco crear una confrontación política entre Ebrard Casaubón y Claudia Sheinbaum, dos de los principales aspirantes a relevarlo en 2024.

«Se quedaron con las ganas», dijo el mandatario mexicano a sus opositores y quienes creían que podía ser utilizada la institución de procuración de justicia como parte de la carrera presidencial.