Los Oscar, la fragilidad humana y la tecnología

Como hace mucho no ocurría, la fragilidad del ser humano no se mostró en una película, sino en todo un evento que enmarcaba, precisamente, premiar lo que se plasma en la pantalla grande.
Pero también hubo otro rubro que se destacó en la 93 entrega del Oscar, no para mostrar naves espaciales o monstruos en batalla como King Kong o Godzilla: la tecnología.

Como se esperaba, la gala inició con una “alfombra” que ahora sí sirvió para mostrar el camino al reducido grupo de invitados al salón del Dolby Theatre, en Los Ángeles, California, y no como pasarela para ensalzar diseños o joyería de reconocidos personajes.

Al iniciar la velada, la primera anfitriona, Regina King, quiso disminuir un poco la tensión al asegurar que a cada uno de los presentes ya se les había aplicado la vacuna contra el Covid-19.

Y si bien es cierto que se permitió el no uso del cubrebocas, el formato de la entrega dejó claro que con todo y vacuna, nadie se arriesgaría, pese a la burbuja de 14 días previos en la que estuvo cada uno de los participantes, a un posible rebrote entre ellos por lo que en cada mesa donde no se sirvió ningún alimento, se colocó un vaporizador para que el lugar estuviera lo más sanitizado posible durante las tres horas que duró la transmisión.

Además, no se permitió más de cuatro personas en cada espacio, la “estatuilla dorada” no fue entregada en mano al ganador o ganadora, sino se colocaba en una pequeña mesita, no había interacción entre quien daba a conocer a los nominados y el triunfador o triunfadora, así como que no salían juntos del pequeño escenario.

La fragilidad del ser humano no podría ser trastocada, así que Youn Yoh-jung, quien se llevó el Oscar como Mejor Actriz de reparto por Minari, se quedó con la ganas de abrazar a Brad Pitt.
En cuanto a los nominados, la tecnología hizo posible que, salvo algunas excepciones, como la de sir Anthony Hopkins, quien ganó el rubro de Mejor Actor, por Father, estuvieran en la entrega de manera virtual.
Así, se pudo ver a Olivia Colman, quien buscaba ser la Mejor Actriz, por Father, y otros de sus colegas desde Londres, es decir con ocho horas de diferencia.

En el caso de Nicolas Becker, agradeció desde París el que junto a Jaime Baksht, Michellee Couttolenc, Carlos Cortés y Phillip Bladh (estos últimos en Los Ángeles), haya ganado la estatuilla por Mejor Sonido, en la cinta Sound of Metal. En la misma ciudad estaba Florian Zeller, quien obtuvo el triunfo por Mejor Guión Adaptado que hizo de The Father.

Además, Sacha Baron Cohen, nominado como Mejor Actor de Reparto, por The Trial of the Chicago 7, estuvo acompañado de Isla Fisher, y en Australia, cuando al otro lado del mundo ya eran las 9:00 de la mañana del lunes, entre otros.
Así que sin importar si fueron justos o no los triunfos de cada uno de los trabajadores del entretenimiento en Hollywood el pasado domingo, lo interesante fue ver cómo, pese a lo que se diga, el temor aún continúa, sin importar al DJ que “amenizó” la ceremonia o el contoneo del trasero de Glenn Close.

Y no hay que olvidar el corto en donde se recuerda a los que fallecieron el año anterior y que en esta ocasión se dio un repaso a 95 de estos “constructores de sueños” (el recuento más grande en la historia del Oscar) que murieron de finales de febrero de 2020 a principios de abril de 2021, alguno de ellos por Covid-19, como en el caso de Andrew Jack, un entrenador de dialectos inglés que trabajó en más de 80 películas.

Él le enseñó cómo dar “el ancho” a Robert Downey Jr. en Chaplin; Pierce Brosnan al interpretar a Jamen Bond; Cate Blanchett y Viggo Mortensen en El Señor de los Anillos.
Jack también actuó en Star Wars: The Forse Awakens y Star Wars: Tha Last Jedi, como el major Caluam Ematt y prestó su voz al personaje Moloch, en Solo: A Star Wars Story. Su último trabajo fue para The Batman.

Andrew enfermó de Covid-19 el 28 de marzo de 2020, murió el 31 de ese mes, tenía 76 años.

Liga de In Memoriam del Oscar 2021

Más en LaHoguera: La batalla de Televisa-Univisión contra Netflix, humor involuntario