Murió el científico mexicano Mario Molina, Premio Nobel de Química 1995

La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) informó que Mario Molina, científico mexicano y Premio Nobel de Química 1995, murió este miércoles a los 77 años de edad, causando la reacción entre distintos actores políticos, jurídicos y académicos.

La UNAM informó que José Mario Molina-Pasquel y Henríquez, distinguido universitario, murió este día sin dar detalles del suceso. Tras el anuncio, las distintas facultades e instituciones que integran a la ‘Máxima Casa de Estudios’ de México emitió una serie de publicaciones en memoria del acaecido científico y su solidaridad con familiares y amigos. 

El Centro Mario Molina comunicó que este murió en la Ciudad de México. Además, agradeció a nombre de su esposa, hijos y hermanos las prontas muestras de cariño y pensamientos durante esos momentos de duelo para la familia. En el comunicado, el Centro señaló que el Dr. Mario Molina siempre dedicó su vida a investigar y a trabajar en favor de proteger el medio ambiente, por lo que fue un mexicano ejemplar y siempre será recordado con orgullo y agradecimiento. 

Mario Molina recibió el 10 de diciembre de 1995 el Premio Nobel de Química en Estocolmo, Suecia por sus estudios sobre química atmosférica y la relación de los clorofluorocarburos con el adelgazamiento de la capa de ozono. En esa ocasión, fue premiado junto a Paul Crutzen del Instituto de Química Max Planck de Alemania y Sherwood Rowland, del Departamento de Química, de la Universidad de California en Estados Unidos, con quien escribió en 1974 su artículo “Stratospheric sink for chlorofluoromethanes: chlorine atomc-atalysed destruction of ozone”, el cual les daría más de 20 años después el galardón.

Por ello, la UNESCO , a través de su representación en México, lo citó como uno de los científicos más destacados en la historia del país, recordando que también fue ganador del premio «Campeones de la Tierra» de la ONU. «Que su genio y legado sean motores para las generaciones presentes y futuras», redactó.

La pena llegó a la esfera jurídica y política del país. El ministro Arturo Zaldívar, presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), también envió sus condolencias a la comunidad universitaria y al país entero «por la pérdida de un ilustre mexicano», coincidiendo que su figura había sido motivo de orgullo nacional y era un gran ejemplo para las nuevas generaciones. 

Desde el poder ejecutivo, el primero en manifestarse fue Marcelo Ebrard, secretario de Relaciones Exteriores de México. A este se le sumó Esteban Moctezuma Barragán, titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP) quien también aseguró que pese a su partida quedará su ejemplo para la niñez y la juventud nacional. 

El vocero presidencial, Jesús Ramírez Cuevas, también envió el pésame a familiares y amigos del fallecido científico, deseando que sus aportaciones a la ciencia trasciendan en el tiempo.  En tanto, AMLO emitió un corto tweet enviando sus condolencias a los familiares.

La Jefa de Gobierno de la CDMX, Claudia Sheinbaum, también utilizó sus redes sociales para despedir a Mario Molina, destacando que dedicó su vida para que el conocimiento científico ayude a mejorar el medio ambiente y los recursos naturales del planeta. 

El investigador formó parte del gobierno capitalino al “coordinar de nuevo el programa de la calidad del aire y del cambio climático para la Ciudad de México». No obstante, con la llegada de la pandemia a México dio una de sus últimas aportaciones de peso al recomendar el uso del cubrebocas para evitar un mayor número de contagios de Covid-19. 

El pasado 15 de junio, Mario Molina dijo que estaba a favor del uso de cubrebocas puesto que a través de uno de sus últimos estudios había comprobado que ello ayudaba a disminuir los «aerosoles» o PM 2.5 que se emanan al hablar, los cuales son importantes para la transmisión del Covid-19.