Médicos Sin Fronteras apoya a los más necesitados en esta pandemia

Desde el inicio de la pandemia del Covid-19 , en México el sistema de salud ha sido clave para el combate de esta crisis sanitaria, además del apoyo de distintas organizaciones sin fines de lucro como Médicos Sin Fronteras, que desde hace varias décadas se enfoca en la atención de migrantes y a las comunidades más pobres de algunos estados de la República

Loïc Jaeger, director de Médicos Sin Fronteras para México y Centroamérica, señala en entrevista para La Hoguera que ellos han prestado sus servicios desde que se registró el primer caso de Covid-19 en el país.

“Somos en el mundo casi 45 mil integrantes. Aquí en México antes de Covid-19 éramos más de 200, pero ahora por la pandemia somos cerca de 400 personas que atendemos la crisis sanitaria”.

“Cuando la cifra de contagios se elevó empezamos a colocar centros de atención directa, entonces estos son como hospitales de campo, en las cuales atendemos a pacientes que tienen covid-19 sean pacientes leves o severos”, afirma el director de Médicos Sin Fronteras.

El director de Médicos sin fronteras señala que ellos no forman parte del gobierno y su objetivo no es reemplazar al Sistema de Salud; no obstante, siempre están dispuestos a ayudar cuando se satura dicho sistema.

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“En Tijuana intervinimos porque el sistema no lo lograba, pero con la idea de que el sistema se había fortalecido pudimos entregar el centro al hospital para luego intervenir en otros lugares”.

Loic Jaeger señala que las necesidades en México respecto al combate del Covid-19 son enormes y claramente no tienen capacidad para estar en todas partes, es por ello que una de sus fortalezas es la amplia experiencia que tiene el personal de salud en muchas crisis sanitarias en donde han colaborado.

Afirma que la fuerza de MSF es que cuentan con “personal internacional, por ejemplo varios han trabajado en Europa o en otros lugares con Covid y ya tienen la experiencia”.

Los sistemas de salud, están rebasados en todas partes del mundo, aun “en países que decían que tenían grandes sistemas médicos, nosotros nos pudimos dar cuenta que estos sistemas no estaban adaptados para trabajar con pandemias” subraya Loïc Jaeger.

Respecto a las agresiones que se han registrado hacia el personal médico en México, señaló que sucede en todos los países. “Nosotros tenemos experiencia en todo esto, por ejemplo el ébola fue una pandemia muy fuerte en cuanto a la discriminación a los pacientes y el personal”.

Es por ello que “cualquier ataque al personal de salud o discriminación es inaceptable porque desafortunadamente lo hemos sufrido en carne, tenemos colegas que fueron asesinados por querer ayudar”. No obstante, asegura que estas agresiones vienen de una minoría.

“Afortunadamente no hemos registrado ningún ataque, sin embargo varios de nuestros compañeros se han dado cuenta de algunos comportamientos de rechazo en la calle”, desaprobó.

Médicos Sin Fronteras tiene presencia en más de 70 países en donde apoyan en el combate de distintas epidemias que han azotado el mundo en las últimas décadas; han brindado atención médica a víctimas de catástrofes naturales, así como a refugiados por conflictos de diversa índole, generalmente, bélicos.

“Hemos atendido epidemias como la malaria, el ébola, el VIH, la tuberculosis y el sarampión”. En cuanto a los conflictos bélicos, actualmente apoyan en Afganistán, Sudán del Sur, Siria, Yemen, y hace poco en Colombia.

En México tienen presencia a partir de los sismos del 85 y, desde entonces, se han avocado a apoyar médicamente en las comunidades más vulnerables del país. Asimismo han desarrollado programas de ayuda psicológica, actualmente atienden a las mujeres o víctimas de violencia interna en Tamaulipas y Guerrero.

Ahora por los protocolos de sana distancia, y con el objetivo de no dejar de lado la atención de violencia interna, se han implementado sesiones online o telefónicas.

Médicos Sin Fronteras, es una organización sin fines de lucro y se sostiene con el apoyo de la sociedad, tanto con donativos como con la difusión de su gran labor humanitaria.

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