”Violencia en México, producto de contubernios de la delincuencia con autoridades»: AMLO

El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) declaró que la violencia en México, incluida la relacionada con el ámbito electoral, es producto de contubernios entre la delincuencia con las autoridades. Además, reiteró su deseo de que la lucha por el poder sea pacífica y no se busquen soluciones punitivas a los problemas, como desean los conservadores.

Durante la ‘mañanera’, AMLO pidió entender que la violencia en México se desató primeramente por el abandono del pueblo por parte de los gobiernos y la complicidad de autoridades con la delincuencia organizada. Señaló como ejemplo el sexenio de Felipe Calderón Hinojosa, al que calificó como un periodo donde hubo un «narcoestado» debido a la participación del secretario de Seguridad, Genaro García Luna, en actividades delictivas.

«Cuando se pinta bien la raya [entre autoridades y delincuencia] hay garantía de vivir en paz […] Todavía lo que padecemos en caso de política electoral tiene que ver con eso. Se establecieron vínculos entre autoridades y delincuencia, era darle dinero a un candidato para que si ganaba el presidente le dejara nombrar al secretario de Obra Pública; luego para que le dejara nombrar al jefe de policía, luego ya era poner al candidato a presidente municipal», indicó el mandatario.

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López Obrador sostuvo que esta práctica se estableció durante el periodo neoliberal o «neoporfirista» por parte de los que se sentían dueños de México y por eso permitieron que Genaro García Luna ocupara tan altos puestos en el gobierno federal. Asimismo, consideró perversos a los integrantes de dichos grupos, así como hipócritas por intentar montar una campaña para acusarlo de ser un narcopresidente pese a tal antecedente.

AMLO expresó que sus adversarios nunca se imaginaron con quién se iban a topar al llegar al máximo cargo de la administración pública federal, pues estaban acostumbrados a someter a los presidentes. Además, opinó que era difícil que estos no fueran peleles o títeres de los potentados que tenían secuestrado al gobierno, a los que calificó como «una banda de malechores».

Finalmente, el presidente de la República declaró que la política es un asunto de convencer con argumentos, no del ejercicio de la violencia. A la par, indicó que desea terminar su gobierno sin actos de represión, masacres y desaparecidos, es decir, sin autoritarismo como el que ejercían los gobiernos conservadores, que quieren resolver todo mediante el uso de la fuerza y con leyes punitivas.