Urgen especialistas a atender fenómeno de Sargazo

Desde marzo de este año, el Caribe mexicano ha comenzado a sufrir las consecuencias de un nuevo fenómeno natural, que podría considerarse ya un desastre ambiental: la llegada de inmensas cantidades de sargazo, una microalga marina.

Frente a este problema, las doctoras Brigitta Ine van Tussenbroek y Martha García ofrecieron una vídeoconferencia desde el Instituto de Ciencias del Mar y Limnología, ubicado en Puerto Morelos, Quintana Roo.

Pues se observa “a corto plazo un desastre ecológico, pero por ende, si es ecológico, es un desastre socioeconómico; porque toda la industria de aquí en este estado de Quintana Roo depende del turismo”, afirma.

Esto debido a que la presencia del material orgánico ya ha modificado la industria turística de la región.

Acorde con el testimonio de las investigadoras, el sargazo se acumula en la superficie del agua en “grandes manchas” las cuales tiñen las azules aguas caribeñas de un tono marrón.Además de que al llegar a las costas comienza su descomposición ocasionando malos olores a causa del desprendimiento de gases, como el ácido sulfhídrico.

Muchos de los hoteles de la zona, afirman, gastan mensualmente un millón de pesos para la limpieza de sus propias playas.

Tussenbroek menciona que ante la magnitud del problema la “Semarnat decidió que si tienen otros medios como remover el sargazo en su playa, lo único que tienen que hacer es mandar un aviso. Entonces ya no se requiere un estudio de impacto ambiental, como es costumbre, porque tarda demasiado”.

“Hasta la fecha muchos grandes hoteles no han entregado el cómo están haciendo esto” declara, pues únicamente 16 de ellos han rendido cuentas a la Secretaría. “Todo el mundo está lidiando con este problema como puede”.

Las teorías que se tienen hasta el momento señalan que el cambio climático ha afectado las corrientes marinas, modificando la interacción de la flora y fauna. Se sabe que los únicos países del Caribe que no han sufrido las consecuencias de ello son Venezuela, Colombia y Costa Rica “porque no están en el patrón de corrientes”.

La doctora Brigitta asegura que este fenómeno deberá tratarse de manera urgente, antes de que el ecosistema marino cambie de manera irreversible.

“Es urgente el manejo integral que considere el conocimiento científico, marco jurídico y la forma más eficiente de colectarlas sin dañar a la fauna asociada”, señala.