Sheinbaum deja a Morena decisión de aceptar a los Yunes; rechaza que haya habido acuerdo para votar reforma judicial

La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo dejó en manos de Morena la decisión de si aceptan al exgobernador de Veracruz Miguel Ángel Yunes Linares y a su hijo senador Miguel Ángel Yunes Márquez que se integren a Morena, pero les recomendó revisar si los estatutos les permiten entrar. Además, aseguró que, hasta donde tiene conocimiento, no hubo una negociación para que votaran a favor de la reforma al Poder Judicial de la Federación, sino que fue decisión de ellos.

Durante su conferencia de prensa, la mandataria federal se separó de la decisión de que el exgobernador veracruzano y su hijo —expulsados del PAN— puedan llegar a las filas de su partido, pues dijo que esa determinación es algo que los dirigentes guinda, Luisa María Alcalde Luján, y Carolina Rangel Gracida, secretaria general, deberán tomar.

“Fue una decisión de ellos, y también se ha dicho que fue para quitarles las carpetas de investigación que llegaron a tener, es una decisión de ellos haber votado a favor de la reforma al Poder Judicial, no hubo una negociación, hasta donde yo sé, que iban a entrar a un partido político y en todo caso es una decisión que debe de tomar la dirigencia de Morena de que si, de acuerdo a los estatutos, pudieran entrar o no a Morena, pero no es que haya sido una negociación en ese sentido. Es una decisión de ellos haber votado por las propuestas que envió el presidente (Andrés Manuel López Obrador) y que hemos seguido enviando, entonces la decisión de que, si entran a Morena o no, le corresponde a la dirigencia”, reiteró.

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Pese a subrayar que es una decisión de la dirigencia de Morena la aceptación de los Yunes en el partido, la presidenta señaló que se debe “evaluar” con base en que se tiene “que cuidar” el movimiento de la Cuarta Transformación.

Cuestionada sobre si le parece bien que padre e hijo puedan añadirse al partido, insistió en que no se meterá en el tema, porque a ella desde la Presidencia le corresponde garantizar que no regrese el régimen de privilegios y gobernar con los principios del humanismo mexicano.

“Le corresponde a la dirigencia, no voy a meterme a ese tema, nosotros tenemos que cuidar al movimiento del que venimos. A mí me toca ahora desde el gobierno garantizar que no haya corrupción, que no regrese el régimen de privilegios, que quede perfectamente claro el poder político del económico, gobernar con el humanismo mexicano (…) la dirigencia tiene que evaluar en este marco”, reiteró.