Reportan fallas de internet de Telmex y mala atención

“Haremos todo lo posible para atender tu reporte a la brevedad, te ofrecemos una disculpa”, es el mensaje que una usuaria de Telmex lee en la pantalla del teléfono que consume datos mientras la agobia la espera de casi 48 horas desde que presentó su reporte de falla a la empresa otrora estatal y que fue vendida al ahora uno de los hombres más ricos del mundo.

La falacia de la eficiencia del sector privado sobre el Estado, los mexicanos la pueden constatar con las caídas del sistema para hacer pagos al gobierno de la Ciudad de México, con la saturación de la red del SAT, la falta de cobertura en lugares distantes y la mala recepción en sitios como Puerto Escondido y lugares cercanos y qué decir de trayectos carreteros donde se está prácticamente desconectado.

También en otros rubros, como la televisión, los mexicanos han sido engañados al pasar de una oferta limitada a contenidos carentes de creatividad, calidad e innovación. Ver la programación de la televisora del Ajusco es tan motivador como pararse bajo cables de alta tensión. Ejemplo de que el Estado puede hacer bien las cosas en este ámbito es sin duda la BBC.

Los bancos también son otro botón de muestra de cómo el gobierno pareciera estar coludido de facto para permitir que se siga expoliando a las familias mexicanas con costo del crédito (CAT, costo anual total hasta de 109.7% y tasas de interés anual moratoria de 180%).

En el caso de las filiales extranjeras estas cobran tasas de interés que rebasan con mucho la que aplican en sus países sedes. De allí que México aporte hasta más de la mitad de la ganancia global a BBVA.

Así, en 2022 las utilidades de BBVA México fueron de 84 mil 800 millones de pesos. Las operaciones en el país le aportaron 52% de la ganancia total que obtiene en su nación y otros países en los que opera.

La eficacia no debe ser exclusiva del sector privado. Debe ser la regla en todo el quehacer humano, además de la probidad.