Morena y aliados aprueba en lo general la reforma al Poder Judicial

Tras más de 11 horas de debate y dificultades para instalar la sesión, diputados de Morena, PT y PVEM avalaron en lo general el dictamen de reforma al Poder Judicial de la Federación con 359 votos a favor y 135 en contra. En tanto que seis horas después avalaron en lo particular con 357 votos a favor y 130 votos en contra, tras desechar las reservas hechas al dictamen por lo que se ordena su remisión a la Mesa Directiva de la Cámara de Senadores que adelantaron sesionará a las 10:00 de la mañana.

En medio de gritos de “¡somos la resistencia!” de la bancada del PAN y a la que se sumaron algunos priistas y de Movimiento Ciudadano, que resonaron en la sede alternativa a la que llamó a sesionar la mayoría legislativa en la Sala de Armas del Deportivo Magdalena Mixhuca, luego que desde tempranas horas trabajadores del Poder Judicial se instalaran en los accesos de la Cámara de Diputados para tratar de impedir la sesión de aprobación, los morenistas advirtieron que la reforma y todo el Plan C seguiría adelante, pero evitarían el enfrentamiento y respetarían el derecho a manifestarse de quienes están en contra del dictamen.

Sin embargo, hasta la sede alterna, en la alcaldía Iztacalco, a pocos kilómetros del recinto legislativo de San Lázaro, llegaron estudiantes de Derecho de universidades principalmente privadas para pedir un encuentro con los diputados de la mayoría morenista, pero al no darse intentaron dar portazo, pero que fue resistido por cadenas, candados y policías de la Ciudad de México que resguardaron el recinto. Los jóvenes bloquearon vialidades primarias como el Viaducto Río Piedad y el puente que conduce a la Terminal 2 del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) lo que desató un enfrentamiento verbal con algunos automovilistas que exigían la liberación de las vías.

Pese a todos esos obstáculos, Morena llevó a cabo la instalación de la sesión que tras un acuerdo en la Junta de Coordinación Política (Jucopo) decidieron que, debido a las condiciones, pues el recinto alterno es una cancha de basquetbol, por lo que no contaban con una pizarra para medir el quórum y sillas incómodas, así como el calor en un lugar cerrado como ese, la sesión sería una sola para discutir en lo general y particular el dictamen de reforma, cambiando de esta forma el acuerdo de este domingo que señalaba que la discusión general se realizaría este martes y en lo particular el miércoles.

La sesión iniciada a las 4:00 de la tarde en la que apenas empezada se tuvo que declarar un receso de 30 minutos a petición de la bancada del PAN que reclamó que algunos legisladores no habían podido todavía entrar a la sede alterna, y que fue reiniciada cumplido ese plazo, desde un inicio se hizo sentir la aplanadora de la Cuarta Transformación al avala el orden del día, pese a los reclamos de los legisladores del PRI , PAN y Movimiento Ciudadano que señalaban que no estaban de acuerdo porque se le estaba “dando la espalda” al pueblo que se manifestaba en San Lázaro al no tener diálogo con ellos.

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Ya iniciadas las mociones suspensivas, el diputado Rubén Moreira Valdez —que fue confundido con su hermano Humberto por el vicepresidente de la Mesa Directiva, pero en funciones de presidente, Sergio Gutiérrez Luna— sugirió a la mayoría legislativa “certificar” a asistencia legal o el quórum necesario establecido porque afirmaba que no había manera de saber que efectivamente estaba la cantidad para sesionar. Ante ello, también advirtió que si no se daba esa certeza lo más probable es que se presentarían una acción de inconstitucionalidad. Sin embargo, esta “sugerencia” no fue considerada.

En tanto que los legisladores del PAN advirtieron que se estaba incurriendo en un desacato porque existen dos órdenes de suspensión liberados por dos jueces que ordenaron no discutir ni avalar el dictamen de reforma.

Durante la discusión, en representación de grupo parlamentario de MC, Juan Ignacio Zavala, adelantó el voto en contra de su bancada para la reforma judicial de lo que llamó “mal llamada reforma judicial”, porque afirmó es una reforma de ideas viejas que busca cortar las posibilidades de las generaciones nuevas, además de que olvida por completo a los que más necesitan la justicia. “Es una reforma de revancha. No engañen a la gente con esta reforma no habrá un mejor acceso a la justicia y los más ricos seguirán siendo los más beneficiados”.

“Estos cambios son un fraude y un engaño al país, sino ¿dónde están los cambios? De los más pobres, ¿dónde están los intérpretes? ¿Qué proponen para las mujeres? (…) no hay respuestas a estas preguntas, solo dispendio en más elecciones”, apuntó el también sobrino de Margarita Zavala.

Por su parte, Jericó Abramo Masso del PRI, aseguró que la reforma “vulnera” la independencia del Poder Judicial (PJ) que “pone en riesgo el futuro democrático”, pues afirma que la iniciativa parte de un diagnóstico equivocado que no resuelve el acceso a la justicia y tampoco ayuda a las víctimas y solventa la impunidad.

“Esta reforma no tiene ni pies ni cabeza, sin presupuesto medible ni ejecutable. No han dicho cuánto costará a los mexicanos”, dijo el diputado al asegurar que estaba defendiendo y representando a los jóvenes que afuera de la sede alterna bloqueaban las avenidas.

En tanto, Mary Carmen Bernal Martínez del PT recordó que la mayoría de los mexicanos afirman que la justicia en el país no es pronta, expedita ni igualitaria y es por ello que respaldan la reforma judicial. Contrario a lo que afirma la oposición, la diputada apuntó que en los diálogos celebrados por la reforma sí se escuchó a los ciudadanos, especialistas, trabajadores y ministros del Poder Judicial, tanto que al dictamen se le hicieron 100 modificaciones para agregar sus propuestas.

“A cada ministro gana al día 1 millón 441 mil 390 pesos, es decir, con el doble del presupuesto solventa la mitad de lo que resuelven las 32 entidades”, dijo al tiempo que aseguró que el Poder Judicial seguirá gozando de autonomía e independencia porque seguirá teniendo presupuesto para cumplir con sus obligaciones, pero no podrá invadir las funciones de otros poderes.

La diputada Paulina Rubio Fernández, del grupo parlamentario del PAN, inició su participación reclamando una vez más una supuesta “sobrerrepresentación” de la mayoría parlamentaria, para después referirse al dictamen de reforma de la que apuntó se debe únicamente a “una venganza” porque el Poder Judicial le puso “tuvo el valor de ponerle un alto” al Tren Maya, al desabasto de medicamentos, entre otras, “eso fue su gran pecado para que busquen esta destrucción”.

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Con playeras y mantas con la leyenda #SoyResistencia de la bancada panista, la diputada afirmó que la reforma «no es para los ciudadanos» sino del presidente Andrés Manuel López Obrador que «ordenó» mandar «al diablo las instituciones».

Esta consigna de “¡resistencia!” más tarde les valió varias alusiones de los legisladores de la Cuarta Transformación que les reclamó que “no les queda” esa frase porque la resistencia es la que hacen los pueblos originarios, los indígenas y los migrantes, no ellos, los privilegiados.

Por ello, el morenista Humberto Fernández les cuestionó a modo de burla si después también iban a decir “¡Zapata vive, la lucha sigue!”, cuando no creen en esas banderas.

Por su parte, Ricardo Monreal, coordinador de la bancada de Morena, subrayó que “el Plan C” va y no solo la reforma judicial, sino también las otras 18 reformas constitucionales porque ese fue el mandato del pueblo de México y en ese sentido cumplirán.

“Este es el origen de lo que ahora tenemos. El presidente planteó al pueblo de México el Plan C y nosotros lejos de la violencia verborréica, de la violencia de personajes que se auto engañaron, fuimos a las calles, a recorrer pueblos, fuimos a las plazas y les dijimos que si votaban por nosotros votarían por el Plan C del presidente, no engañamos a nadie, por eso en el movimiento estamos orgullosos de tener un presidente, el mejor que ha tenido el país. Por eso ganamos y eso nadie lo puede ocultar”, sostuvo.

Ricardo Monreal, recordó que los diputados de la Cuarta Transformación ganaron 256 de 300 distritos, el 85 por ciento de los distritos del país, y por eso aseguró que seguirán defendiendo al pueblo. “El pueblo está harta de la dictadura de la toga y el birrete, el pueblo está harto de la corrupción, nepotismo, tráfico de influencias del Poder Judicial. Y nosotros no vamos a titubear y vamos a ir adelante con esta y las 20 reformas constitucionales”.

Explicó que los asiste la razón legal, constitucional y social, por ello dijo que los ciudadanos no deben preocuparse porque va a haber una división de poderes e independencia. “Tengan confianza tenemos una estupenda mujer que nos va a gobernar. No nos distraigamos. Vayamos a territorio a explicar a los ciudadanos”.

Finalmente, la Cuarta Transformación aseguró que los derechos laborales de los trabajadores del Poder Judicial están a salvo y garantizaron a los inversionistas que habrá mejor Estado de Derecho y un mejor ambiente de negocios, por lo que pidieron “que no se asusten”; en tanto que los panistas se lanzaron contra el ministro en retiro y asesor de la presidenta electa Claudia Sheinbaum, Arturo Zaldívar, a quien acusaron de que será el que podrá a los nuevos integrantes del Judicial.