«Las guerras comerciales son buenas», amenaza Trump

Luego de que se le cuestionara sobre las repercusiones que sus políticas proteccionistas tendrían en las relaciones comerciales de Estados Unidos, Donald Trump recurrió a Twitter para dejar en claro que, para él, «las guerras comerciales son buenas y fáciles de ganar».

Ayer, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció nuevos aranceles a las importaciones de acero y aluminio. Esto con el argumento de revitalizar estas industrias en la unión americana.

La decisión de Trump fue severamente criticada por países como Canadá y Japón, grupos industriales y productores, así como miembros del Congreso de Estados Unidos. Incluso, después del anuncio, el índice Dow Jones perdió 400 puntos, acrecentando las caídas que ha sufrido Wall Street a lo largo de 2018.

Estos aranceles afectarían directamente a México, que, de acuerdo con las cifras, es el cuarto exportador de acero a Estados Unidos. Aún con los beneficios del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, la industria mexicana se vería severamente afectada.

Por esta razón,  la Cámara de la Industria del Hierro y el Acero dijo que de entrar en vigor estos aranceles, el gobierno mexicano deberá responder con medidas recíprocas. Iniciando, en el proceso, una guerra comercial a ambos lados de la frontera.

Medidas similares fueron sugeridas por el gobierno y los industriales de China, otro de los principales vendedores de acero a EU.

Pese a esto, y como ya es su costumbre, el mandatario se empecinó en su buen juicio y argumentó por Twitter que las guerras comerciales son buenas, y fáciles de ganar, cuando un país como Estados Unidos pierde miles de millones de dólares en prácticamente todas las relaciones comerciales que mantiene con otros países.

Posteriormente, con otro twitt, Trump se quejó de que hay países que implementan aranceles de hasta el 50% a las exportaciones estadounidenses, mientras que los suyos siguen en ceros. Por eso, y para combatir el déficit comercial de 800 mil millones de dólares, el magnate anunció que pronto se pondrán en uso «impuestos recíprocos». Es decir, se cobrará a las importaciones de determinados países lo que estos cobren a las exportaciones americanas.

Poco después, el secretario de Comercio de la administración Trump, Wilbur Ross, dijo que los aranceles de Trump, un 25% para acero y 10% para aluminio, podrían ser aplicados a todos los países por igual. Aunque aún deben tratar algunos temas «intrincados», Ross asegura que el esta política tendrá un efecto amplio.