México está en un proceso de rediseño de la arquitectura de la relación bilateral con Estados Unidos, afirmó Roberto Velasco Álvarez, jefe de la Unidad para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores.

El diplomático afirma que el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador está pasando de un modelo asistencialista a uno en que se busca una colaboración de reciprocidad y equilibrio. “Tenemos un gobierno con una visión transformadora en México”.

Explicó que, anteriormente, con la iniciativa Mérida se tenía una visión asistencialista, mientras que con el relanzamiento de la cooperación en seguridad, ahora con el ‘Entendimiento Bicentenario’, se pone en el centro una visión centrada en las causas de la violencia, como el tratamiento de las adicciones, la incorporación de la inteligencia financiera para desmantelar las organizaciones en ambos países y el combate al tráfico de armas, una prioridad de México por la capacidad de fuego que le da al crimen organizado.

Por otra parte, reconoció que la relación binacional ente México y Estados Unidos ha experimentado cambios en los últimos años, y ello se ha reflejado, en parte, en la migración que se dio en los años 60 que excede los 30 millones de personas.
Además, indicó que, en contraparte, “hay un fenómeno del que se habla poco” y que se refiere a la comunidad de ciudadanos de EU radicados en México y que, de acuerdo con cifras del Inegi, asciende a un millón de personas, lo que los convierte en la comunidad más grande radicada fuera de su país.

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Subrayó que el intercambio comercial entre ambas naciones se ha fortalecido al grado de que México es el mayor socio económico de EU, incluso por encima de países de Europa y Asia con grandes economías.

“Hace unas décadas alguien que dijera que México iba a desplazar a todos los países del mundo como socio comercial de Estados Unidos, hubiera sido considerado como un idealista, un tonto o alguien que estuviera desconectado de la realidad”, señaló.

Roberto Velasco agregó que es importante el relanzamiento que se dio de la relación bilateral con el T-MEC pues se privilegia el intercambio comercial entre los tres países antes que con otras naciones, en el cual se plantearon cuatro pilares: recuperación de la economía, fortalecimiento de la infraestructura, facilitación comercial, innovación y coordinación en industrias críticas para mitigar las disrupciones en las cadenas de suministros.

Otros de los acuerdos es impulsar el desarrollo sustentable en el sur de México y el norte de Centroamérica, mitigación de riesgos relacionadas con tecnologías de la información, ciberseguridad e invertir en las personas para tener una fuerza laboral más inclusiva, aseguró el jefe de la Unidad para América del Norte.

La pandemia, por otra parte, ha tenido un impacto profundo en la relación bilateral, en el tema de cooperación de los gobiernos de los presidentes López Obrador y Joe Biden, quien envío 10 millones de vacunas contra el covid-19 para inmunizar a la población que vive en la zona fronteriza; asimismo, ha enviado medicamentos y equipos médicos, reconoció Velasco.