Denuncian desalojo ilegal en Cuajimalpa; acusan violencia y saqueo policial

Vecinos de la delegación Cuajimalpa denunciaron el desalojo ilegal de un predio de varias habitaciones por parte de granaderos de la Secretaría de la Seguridad Pública de la Ciudad de México (SSP-CDMX), a quienes acusaron de saquear sus pertenencias y golpear a civiles. El inmueble, ubicado en la Calle Juárez, en la colonia Cuajimalpa de Morelos, fue desalojado este domingo 18 de febrero, y en el saqueo participaron tanto policías como civiles, informaron testigos.

«A las 4 de la mañana más o menos escuchaba ruidos en mi domicilio y un primo mío que vive con nosotros me comenta que ya había policías en la casa. Entonces, yo me percato que ya están abajo (los policías) esperando en la sala, elementos judiciales, granaderos. Estaban deteniendo a mi abuela y diciéndoles (a mis familiares) que no tocaran las cosas. Los policías dejaron entrar a civiles a que saquearan las cosas y que desalojaran; se estaban llevando todo de una forma muy prepotente y agresiva», narró Olaf Osorio Santillán, quien se identificó como uno de los dueños de la propiedad.

«Y yo les pregunté qué papel tenían para respaldar este desalojo y me dijeron que no tenían por qué hablar conmigo, siendo que yo mis otros dos hermanos somos los dueños», agregó.

Entraron a saquear

«Entonces cuando le pregunté con quién podía hablar, me dijeron que con la actuaria. Entonces cuando estuvo ella me mostró un papel, pero no me dejó leerlo, nomás me lo mostró rápido (unos segundos)», narró Olaf, quien dijo que uno de sus familiares intentó grabar lo sucedido y que los policías le quitaron el celular.

«Uno de los policías me dijo que mejor sacara lo de valor, porque esto se iba a poner feo», remarcó. Olaf también describió que los policías traían consigo herramientas diversas como mazos y palancas para abrir puertas y ventanas de la propiedad.

Otro de los identificados como dueños del inmueble, David Osorio Santillán, narró que fue amedrentado: «A mí me robaron mi cartera, varios videojuegos, mi dinero, una tele, una computadora y, aparte, me pegaron; un policía me quería remitir nomás porque le pregunté con qué autoridad venían».

Habitantes de la propiedad agredidos 

Una mujer de la tercera edad narró que también fue increpada por los policías: «A mí me quitaron mi teléfono, los granaderos; de mi bolsa se robaron dinero, mucho en efectivo, que traía yo en mi bolsa, mis credenciales de banco (tarjetas bancarias) y todo, hasta mis papeles, mi acta de nacimiento y todo».

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Uno de los afectados contó: «A uno de los menores, de unos 11 años, lo lastimaron de la mano, a señoras, a otro menor de edad los aventaron, ni siquiera dejaron agarrar sus cosas y así como van, sacando todo, a romper tubos de agua, un tubo de gas, sí estuvo fuerte».

Una mujer narró llorando: «Se robaron mis joyas, a mí me sacaron sin ropa, tenis, todo se llevaron de mi recámara. Ante mis ojos se estaban vaciando las cosas adentro de su ropa; no me dejaron vestir, me agarraron dormida, estaba en mi cama, se robaron todo lo de mis teléfonos, no puedo cargar mi teléfono».

Un hombre en muletas contó que fue golpeado por civiles desconocidos: «En la mañana entraron estas personas, volaron cerraduras, al momento en que yo me acerco un supuesto policía se me para enfrente: ‘Tienes cinco minutos para desalojar, para sacar tus cosas de valor, porque ya chingaste a tu madre’; cierra la hoja (de desalojo), la vi escasos tres, cuatro segundos. Otra persona me quita el celular, me mete unas patadas y me quita mi cartera, aproximadamente 25 mil pesos».

El mismo testigo reporta que los civiles que saquearon las propiedades venían preparados con mochilas: «Muchos (civiles) se identificaron como de San Fernando y de San Pedro de los Pinos; sacaron todo lo que pudieron. Cuando un policía dijo que ya era todo, todas estas personas se fueron corriendo».

Los vecinos narran que fueron al Ministerio Público de Cuajimalpa a hacer la denuncia, pero que ésta no fue atendida adecuadamente: «Sí vinieron, pero permitieron que nos siguieran robando».

Uno de los testigos identificó a uno de los policías agresores como Antonio Calleja, con el rango de comandante.

La legalidad de la propiedad 

En un documento proporcionado a La Hoguera, se muestra la supuesta orden de desalojo presentada por los policías. En dicho documento se menciona que la hora de desalojo estaba planeada a las 6 mañana del domingo 18 de febrero, y no a las 4:00 horas, cuando se ejecutó.

En el texto se lee: «En los autos del juicio ordinario civil, promovido por Rangel Díaz Julio, en contra de Myrna Santillán Ramírez y Gabriel Santillán Ramírez, expediente número 647/17. La C. Juez primero civil dictó los autos que a la letra dice», y después se vuelve ilegible.

«La propiedad era de mi papá (fallecido); nosotros somos su herederos. Mi mamá sólo es la albacea (Myrna Santillán Ramírez). Mi tío, a quien supuestamente están demandando (Gabriel Santillán), nunca ha vivido aquí. Nos presentaron la copia de la copia de la supuesta orden de desalojo, que sólo es un aviso y que no está firmada ni sellada por ninguna autoridad», relató David Osorio Santillán.

Los Osorio Santillán explican que la propiedad fue peleada hace unos años por una prima lejana de la familia (de la cual no conocen su nombre), pero que ésta no pudo obtener las escrituras del inmueble. Al preguntárseles si conocen a Julio Rangel Díaz, el supuesto demandante citado en el documento, dijeron desconocerlo. «Sólo llegó su abogado que no nos proporcionó cédula ni nada; él mismo vio el documento de desalojo y dijo que era improcedente, porque no trae sello ni nada», explicó David Osorio.

Aunque las víctimas señalaron a los policías como pertenecientes al gobierno de la demarcación, la Delegación Cuajimalpa, a través de la cuenta de Twitter llamada Jefatura Delegacional (@JDCuajimalpa) se deslindó de los hechos en un tweet a La Hoguera, en el cual pedía «aclarar que la policía depende del Gobierno de la CDMX, las delegaciones no detentan el mando de la policia (sic) sino del Secretario de Seguridad Pública».