Niega Zaldívar acusaciones de presunta injerencia de AMLO en SCJN

El ministro presidente Arturo Zaldívar defiende el que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) se mantiene independiente ante las acusaciones de injerencia del presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador (AMLO) tras la renuncia del ministro Eduardo Medina Mora y las acusaciones de supuestas “presiones” para que solicitara su retiro.

Arturo Zaldívar, ministro presidente de SCJN, publicó este sábado un mensaje en el que apuntó que en 2019 no hay una sola sentencia que se pueda tildar con razón “carente de independencia” como algunos afirman ante la relación que este ha tenido con el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) y la reciente renuncia de Medina Mora que algunos vieron como resultado de una “presión” del gobierno para forzar su salida y dar espacio a un nuevo nombramiento leal al nuevo régimen.

Además, cuestionó a sus ahora críticos preguntando dónde se encontraban cuando se dictaron “sentencias polémicas” en otros tiempos y cuándo antes se había intentado una “real transformación” del Poder Judicial de la Federación como ahora presuntamente está sucediendo.

La publicación tuvo reacciones negativas por parte de los actores ubicados en la oposición. Por parte del PRD, Fernando Belaunzarán acusó al ministro de estar asumiendo el discurso oficial de que los críticos de ahora avalaban las “transas del pasado”.

Mientras tanto, del PAN, fue Jorge Triana el que reaccionó destacando que admira su visión liberal y garantista, pero que lo que acababa de redactar es lo mismo que dicen “los aplaudidores” del gobierno

Por esta razón, posteriormente este respondió a algunos que no estaba reclamando a los críticos del gobierno sino a quienes afirman que la Corte no es independiente sin aportar una sola prueba, algo que, aseguró, “hacen daño de manera injusta”.

Te puede interesar: “Acólitos de AMLO buscan censurar a Calderón en el Tec”: Belaunzarán

De igual manera, expresó que el Poder Judicial es un poder equilibrador garante del orden constitucional, especialmente de los Derechos Humanos, por lo que puede entenderse entonces como un contrapeso constitucional y no político en estricto sentido como algunos se lo reclaman.