Gobierno federal se queda con mansión de Ávila Camacho

El gobierno de México se queda con la antigua casa del ex presidente Manuel Ávila Camacho. El día de hoy, fue dada a conocer información sobre la decisión que un juez tuvo frente al litigio que definía si el gobierno federal era el poseedor legítimo ante los reclamos de quienes se dicen herederos del antiguo rancho del presidente que sucedió a Cárdenas.

De acuerdo con el diario Reforma, el Cuarto Tribunal Colegiado en Materia Civil confirmó dos resoluciones previas que impedían a los demandantes el buscar la nulidad del contrato de donación que realizó Soledad Orozco, esposa de Manuel Ávila Camacho, con el que dejó la Residencia ubicada en el hoy fraccionamiento de La Herradura, en el municipio de Huixquilucan, Estado de México.

La propiedad fue edificada en 1946, cuando el presidente Manuel Ávila Camacho terminó su periodo gubernamental en lo que era su rancho «La Herradura». No obstante, el oriundo de Teziutlán, Puebla, falleció 9 años más tarde, pasando la residencia a manos de su viuda, la tapatía Soledad Orozco.

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El rancho del ex presidente comenzó a ser fraccionado en 1962, sin embargo, fue a finales de 1980 cuando la ex primera dama comenzó los trámites para que al fallecer ella la casa pasara a manos del gobierno federal ya que esta no tuvo hijos. No obstante, la cesión al gobierno de la República, especificaba Soledad Orozco, sería específicamente para que la residencia sirviera para hospedar a mandatarios extranjeros que realizaran visitas oficiales a México.

Pese a ello, la residencia siempre ha estado rodeada de cuestionamientos por su uso, puesto pese a que la viuda del presidente había especificado el uso que esta debía tener, distintos medios denunciaron en su momento cómo el lugar fue utilizado de manera discrecional por los presidentes Ernesto Zedillo Ponce de León, Vicente Fox y Felipe Calderón para realizar fiestas privadas de carácter personal, además de que tampoco había transparencia en el uso de los recursos que se destinaban para su mantenimiento.

Según lo publicado hace 22 años en la revista Proceso, Soledad Orozco tampoco habría cumplido con los deseos de su esposo para con la casa. Manuel Ávila Camacho López, periodista fallecido en 2007 e hijo de Maximino Ávila Camacho, comentó que su tío había pedido a su esposa que al morir fuera enterrado en el mausoleo familiar junto a sus padres y hermano en Teziutlán, Puebla, para convertir La Herradura en una escuela o biblioteca en beneficio del Estado de México, cosas que no sucedieron.

El lugar, sin embargo, ha causado expectativa entre algunos de quienes desean que este espacio sea parte de la «Cuarta Transformación», esperando al menos un destino similar al de «Los Pinos» para convertirse en el espacio cultural que supuestamente Manuel Ávila Camacho deseaba.

De acuerdo con el arquitecto Rafael Fierro Gossman, quien en 2016 escribió en su blog una descripción de la casa, esta es una edificación de más de 2,500 metros cuadrados en la que se encuentran distintos tipo de lujo que van desde esculturas hasta piezas de porcelana azul y bronce dorado, salones con tapetes de Aubusson y habitaciones de todo tipo, incluida su propia capilla.