El Chapo buscó traficar droga en transportes de Pemex, declaran en juicio

En la sesión de este miércoles del juicio contra Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, se dio a conocer que el capo sostuvo reuniones con funcionarios de Pemex, declaró Jorge Cifuentes, un narcotraficante colombiano.

Así lo reportó Alan Feuer, periodista de The New York Times, a través de su cuenta de Twitter. La reunión se llevó a cabo a finales del 2007, durante el sexenio de Felipe Calderón. De acuerdo con el testimonio los trabajadores de la paraestatal querían trabajar de la mano con Guzmán Loera, moviendo cocaína en buques petroleros.

Cabe recordar que durante el periodo presidencial señalado se involucró a las Fuerzas Armadas para iniciar una guerra contra el narco. En aquel entonces el director general de Pemex era Jesús Reyes-Heroles González-Garza, quien fue miembro del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y ex secretario de Energía.

Cifuentes relató que estuvo presente en la reunión, en las montañas del escondite secreto de ‘El Chapo’. En dicho lugar se reunieron con un ejecutivo de Pemex llamado Alfonso Acosta. También ahí (estuvo) Dámaso López, uno de los hombres de ‘El Chapo’.

Alfonso Acosta Cobos aparece en varios documentos con el cargo de secretario del Comité de Estrategia e Inversiones y, según el capo colombiano, él era el representante de la petrolera mexicana en las reuniones que se habrían programado con el cártel de Sinaloa.

Jorge Cifuentes detalló que el hijo de Ismael “El Mayo» Zambada era el principal coordinador de la logística del cártel de Sinaloa, quien se encargó de elaborar estrategias para llevar droga a territorio estadounidense desde Centroamérica y Sudamérica

El colombiano aseguró que hubo varias reuniones para discutirlo. La idea fue propuesta por Vicente “El Vincentillo” Zambada Niebla, hijo de (Ismael ‘El Mayo’ Zambada), el socio principal de ‘El Chapo’. Vicente fue el encargado del trato ya que que tenía ‘las conexiones’ con Pemex.

Jorge Cifuentes no dio motivo por el cual el plan no funcionó, aunque contó que pretendían trasladarla desde Ecuador en los buques petroleros a una refinería mexicana de la paraestatal. La refinería Lázaro Cárdenas, en el estado de Veracruz, sería el lugar al que habrían llevado el trasiego de cocaína.