Cámara de Diputados rechaza la reforma eléctrica de AMLO; PAN, PRI, PRD y MC votaron en contra

La Cámara de Diputados rechazó la reforma constitucional en materia eléctrica del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) este domingo. Esto debido a que el dictamen no alcanzó la mayoría calificada requerida para reformar la Carta Magna, sino que  tuvo 275 votos a favor, 223 votos en contra y 0 abstenciones ante la falta de apoyo que tuvo por parte de los grupos parlamentarios del Partido Acción Nacional (PAN), Partido Revolucionario Institucional (PRI), Partido de la Revolución Democrática (PRD)

Pese a que la sesión estaba programada a las 10:00 a.m., el abordaje de la reforma eléctrica de AMLO comenzó después del mediodía debido a un par de recesos que fueron decretados por la Mesa Directiva. Fue el segundo de ellos el más significativo, ya que la diputada morenista Andrea Chávez Treviño solicitó al presidente de ese órgano, Sergio Gutiérrez Luna, que se excusara de votar a la diputada Margarita Zavala por conflicto de interés al «haber recibido millones de pesos de una de las filiales de Iberdrola», Avangrid.

Asimismo, la diputada Lilia Aguilar Gil, integrante de la bancada del Partido del Trabajo (PT), solicitó la misma medida para la diputada perredista Edna Gisel Diaz Acevedo, legisladora que fue captada hablando en el pleno con Paolo Salerno, cabildero de la empresa italiana Enel Group.

La Junta de Coordinación Política (Jucopo) determinó que estas dos se excusaran para poder votar a falta de un procedimiento para resolver la petición. Sin embargo, ambas legisladoras dijeron que no tenían motivos para excusarse y que estaban siendo víctimas de calumnias. “Es además una clara violencia de género y una violencia, clarísimo. Una violencia, una violencia y una falta de respeto a los miles de electores que me pusieron aquí”, mencionó Margarita Zavala.

Tras ello y un fallido intento por detener la discusión con una moción de suspensión por parte de Movimiento Ciudadano, la discusión comenzó. Los primeros en pasar fueron los presidentes de las comisiones de Puntos Constitucionales y Energía, quienes dijeron que la propuesta de reforma constitucional aboga por la recuperación de la conducción de toda la industria eléctrica por parte del Estado. Esto con la finalidad de dejar de concebir a la electricidad como una mercancía especulativa y diseñar un esquema tarifario con sentido de servicio público.

Los argumentos en contra

El primero en posicionarse en contra fue el Partido de la Revolución Democrática (PRD) en voz de su coordinador Luis Espinosa Cházaro, quien también participó en el debate de la reforma energética de 2013 pero acusando de traidores a la patria a sus ahora aliados. Al respecto, este criticó que la coalición “Juntos Hacemos Historia” no haya incorporado, a su consideración, ideas del Parlamento Abierto ni los 12 puntos que pedía junto al Partido Acción Nacional (PAN) y al Partido Revolucionario Institucional (PRI).

“Dejen su dictamen con sus puntos y sus comas, y cuenten con el voto en contra de la coalición Va por México.
Tuvimos cientos de foros de parlamento abierto, cientos. Y vinieron los que estaban a favor y los que estaban en contra”, agregó.

Enseguida, habló Jorge Álvarez Máynez, coordinador de los diputados de Movimiento Ciudadano (MC), quien calificó de “tóxica” la reforma eléctrica de AMLO. Este argumentó que su partido no estaba de acuerdo por considerar que no se trata de una apuesta responsable con el cambio climático ni para los consumidores.

«Apostar por la ineficiencia también es corrupción. La propuesta del Ejecutivo busca darle más poder al gobierno, pero no capacidad. Busca incidir en el mercado, pero no a favor de las y los consumidores. Busca cambiar el sector eléctrico, pero no resolver sus problemas», sumó a sus dichos.

Por parte del PRI, su presidente Alejandro Moreno salió efusivo a vaticinar que la reforma a discusión no pasará y que eran las bancadas del presidente las que ahora estaban “moralmente derrotadas”. Este aseguró que la propuesta incrementaría en más del 27% las tarifas, causaría desempleo y alejaría la inversión privada o proyectos que pudieran generar dinamismo.

El político campechano también dijo que Morena y sus aliados apostaban por un texto que va contra los acuerdos comerciales como el T-MEC. Sobre ello ahondó Ildefonso Guajardo, exsecretario de Economía de Peña Nieto y líder del grupo negociador del tratado, quien dijo que, entre las consecuencias estarían denuncias de inversionista contra el Estado mexicano por el cambio de reglas del sector energético. Al respecto argumentó que los casos podrían ser llevados a un arbitraje internacional e incluso llevarlos a un panel inversionista-Estado donde el Estado afectado podría imponer a México aranceles a sus exportaciones afectando la creación de empleos bien remunerados.

Finalmente, Jorge Romero Herrera, coordinador del PAN en San Lázaro, expuso que votar contra la reforma eléctrica no los haría traidores de la patria y que ellos no obedecen a ninguna empresa como asegura el presidente o Morena. Por el contrario, dijo que también creen en la soberanía eléctrica de México, pero no en que esto deba ser producto del hiperempoderamiento de CFE por decreto, sino mediante la concurrencia entre el sector público y el privado.

“Po mejor que le podría pasar a la CFE y a México es que como empresa se fuera empoderando del sector, pero porque se lo va ganando como empresa, porque se está modernizando, porque está teniendo las mejores prácticas corporativas, porque ofrece el mejor servicio, porque ofrece una mejor tarifa y entonces se vuelve preponderante”, mencionó.

Los argumentos a favor del dictamen

Durante la discusión, Morena, PT y PVEM fueron los partidos que reiteraron su apoyo a la iniciativa de reforma eléctrica de AMLO. Al respecto, estos argumentaron la necesidad de corregir errores provocados por la reforma eléctrica de 2013, advirtiendo también a sus adversarios que de no aceptarlo estarán pagando un costo político para ello.

Desde el PT, Gerardo Fernández Noroña aseguró que sin importar el sentido del voto de la oposición estarán entregando a Morena y sus aliados la presidencia de 2024 por darle la espalda al pueblo mexicano. Este insistió en que los diputados del PRI, PAN, PRD y MC quedarán como «traidores confesos a la patria» por defender un modelo que además de lesionar económicamente a sus consumidores no cumple con las preocupaciones ecológicas que dicen tener, pues el 83% de la energía eléctrica generada por empresas privadas es producida por petrolíferos.

Sobre ello también habló Carlos Alberto Puente Salas, coordinador del PVEM, quien reconoció que su partido se equivocó al apoyar la reforma de Enrique Peña Nieto en 2013. Al respecto, señaló que el modelo energético promovido por la Secretaría de Energía (Sener) de Pedro Joaquín Coldwell puso en riesgo el acceso de los más pobres al servicio eléctrico por quitar a CFE de la generación de energía en beneficio de unos cuantos.

Por otra parte, mencionó que esto no contribuyó tampoco a la disminución de emisiones de gas invernadero, pues no se alcanzó la meta de reducción del 30% del dióxido de carbono para 2020 con relación a las cifras del año 2000. “En 2019 se emitieron 534 mil 688 millones de toneladas de dióxido de carbono, cuando solo debieron emitirse 253 mil 398 millones de toneladas para alcanzar la meta fijada», expuso.

Finalmente, la vicecoordinadora de Morena, Aleida Alavez Ruiz, quien votó en 2013 contra la reforma energética pero con el PRD, declaró que traicionan al pueblo quienes rechazarán en dictamen por abrazar a los «Salinas, Peñas, Calderones, Lozoyas y Anayas» para favorecer a empresas transnacionales. Esta sostuvo que la oposición no leyó el dictamen pues carecen de argumentos convincentes que los llevan a plagiar las sentencias populares que son atendidas.

A la par, explicó que la propuesta parte de materializar un aspecto del derecho humano a la vida digna. Sobre ello expuso que el abastecimiento continuo de energía a toda la población se erige como garantía a la vida digna y de vivienda adecuada, pues implica acceso permanente a energía para la cocina, calefacción y alumbrado entre otras.

Respecto al litio comentó que este mineral debe ser resguardado por el Estado mexicano para lograr la transición energética pero no bajo las reglas del petróleo como lo pide la oposición. «Lamentablemente en esa reforma de 2013 [al petróleo] nos lo dejaron poco protegido como a la luz eléctrica», precisó.

Para finalizar, entre otras cosas, Alavez Ruiz destacó que el dictamen mandata al Estado a establecer mecanismos para la transición energética en una redacción que se estableció a partir del Parlamento Abierto y atendiendo la amplitud que demandaban otros grupos parlamentarios sobre las facultades estatales y no solo de CFE.