«La campaña de guerra sucia no me hizo nada»: AMLO

El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) presumió que pese a la guerra sucia en su contra, a partir de reportajes como el de la renta de la casa de su hijo José Ramón López Beltrán en Houston, Texas, a un contratista de Petróleos Mexicanos (Pemex), su aprobación como gobernante no cayó.

En conferencia de prensa, AMLO declaró que la encuesta de El Universal le pone en 65% de aprobación después de los ataques y guerra sucia no le afectaron. Pese a ese número, también consideró que no se estaba midiendo con exactitud la opinión ciudadana, dado que había un sesgo al hacer la encuesta vía telefónica pues dejaba fuera a la gente más humilde, con la cual superaría el 70% de aprobación, de acuerdo con sus propias encuestas.

Posteriormente mostró los datos de Morning Consult destacando que si bien aparece también con 65% de aprobación y 28% de reprobación, continuaba solo por debajo del primer ministro de la India, Narendra Damodardas Modi , quien posee 73% por ciento de aprobación y 21% de rechazo a su gestión. En tanto, resaltó que ellos dos son los únicos que tienen porcentajes aprobatorios entre los evaluados a nivel global.

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Aunque mantiene una calificación positiva, López Obrador adelantó que continuará insistiendo con el Departamento de Estado de Estados Unidos para que deje de financiar a Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI). Nuevamente, opinó que no deben darle dinero a Claudio X. González ni a María Amparo Casar dado que es incorrecto que financien a grupos opositores que buscan hacer guerra sucia contra su gobierno.

A la par, el presidente expresó que es necesario que el país vecino apoye con ese cambio en la política internacional, pues lleva 200 años vigente y sin eso no mejorarán las cosas ni cambiará el mundo.

Sus palabras se enmarcan en semanas de discusión sobre el reportaje de MCCI, difundido por Carlos Loret de Mola en Latinus, _Reforma_ y Carmen Aristegui, donde se señala que José Ramón López Beltrán había caído en un conflicto de interés por hacer negocios con un directivo de Baker Hughes, contratista de Pemex. Asimismo, la organización y los comunicadores comentaron que tras ello la petrolera estadounidense había tenido «ampliaciones» de contratos.

No obstante a que ya el director de Pemex, Octavio Romero, explicó que no han habido ampliaciones de contratos sino «órdenes de servicio» y que tampoco le han dado licitaciones sin una fundamentación clara, AMLO también cuestionó hoy la calidad moral de Raúl Olmos, autor del reportaje defendido por Aristegui.

«Muy deshonesto, porque además cínico, cinicazo, le preguntan: ‘¿Pero no tenías pruebas?’ ‘No, pero era un asunto político’. O sea, tú calumnias y ya luego se ve si es cierto o no es cierto. ¿Dónde está la ética?», comentó.