Tareas diarias e incluso en fin de semana agobian al estudiar en línea

Debido a que la pandemia de Covid-19 provocó el confinamiento de cientos de miles de personas, las actividades tuvieron restricciones para evitar contagios y la propagación del virus que causa la enfermedad, por lo que entre dichas actividades afectadas están las educativas, donde se tuvieron que implementar medidas como la suspensión de clases para proteger a los estudiantes, mientras que se debieron crear métodos para que los alumnos pudieran terminar el ciclo escolar 2019-2020, como el programa de la Secretaría de Educación Pública Aprende en Casa.

Sin embargo, a medida que la pandemia no cedía y sigue sin ceder, en México continuó dicho programa para el inicio del ciclo 2020-2021, ‘Aprende en Casa II’, donde mediante programas televisivos los estudiantes estarían tomando clases con respecto a su grado de estudios y en un horario en específico de 4 horas, pero algunos padres de familia han señalado que diferentes escuelas, además de seguir el programa de la SEP, implementan sus propios métodos de trabajo, dejando más tareas y trabajos que los alumnos deben realizar.

De acuerdo con testimonios de varios padres de familia, sus hijos incluso están pegados a la televisión o a la computadora los fines de semana, donde se ponen al día con trabajos pendientes y tareas que llegan a mandar los mismos profesores, ya que no basta con el programa ‘Aprende en Casa II’, situación que para algunos es preocupante, ya que además de pasar 4 horas viendo el programa, deben realizar tareas y trabajos que les dejan, quedándose todo el día tras una computadora, por lo que les ha preocupado últimamente ya que consideran que no existe un tiempo para ellos, en los que puedan relajarse, jugar o descansar.

Alejandra Sánchez, madre de familia de un estudiante de secundaria, declaró a La Hoguera que a pesar de que los alumnos tengan como tarea ver los programas ‘Aprende en Casa’, los maestros dejan más tareas, las cuales a veces no están relacionadas con lo que se vio en dicha programación o son cosas que no han visto, por lo que muy apurados deben terminar resúmenes de lo que vieron en la televisión para continuar con las tareas que en ocasiones deben ser entregadas ese mismo día, ya sea mandarlas por correo o por alguna plataforma donde los profesores reciban las tareas, por lo que se quedan más tiempo del que pasaban en la escuela, mientras que acusa que han llegado correos de tareas por hacer durante la madrugada.

«Aparte de tomar las 4 horas diarias de Aprende en Casa, donde los maestros les han dejado hacer resúmenes de lo que vieron, les mandan tareas, casi siempre sobre el tema, pero en ocasiones son tareas de cosas que no han visto y a pesar de que un día a la semana les dan 20 minutos para aclarar dudas, siento que no es suficiente, y solo están aprendiendo a entregar las cosas a tiempo a que estén reteniendo el aprendizaje. Lo que me preocupa es que incluso nos llegan correos de tareas en la madrugada, entonces ni siquiera los fines de semana descansan, porque la entrega tiene un tiempo determinado», asegura.

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Asimismo, no es la única madre de familia preocupada ante esta situación y es que aunque tengan días de asueto, los estudiantes deben entregar tareas, pero no es solo esa preocupación que cargan los padres de familia, ya que estos alumnos se encuentran en el último año de la educación básica, por lo que es en este año donde hacen su transición a la educación media superior, la cual es mediante un examen de admisión, tema que no han podido aclarar dudas o los mismos directivos de la institución les han planteado a los interesados, puesto que es un tema en beneficio de los alumnos.

Son los mismos padres de familia que ven ciertas deficiencias en esta forma de educación y enseñanza, ya que algunos de los profesores que imparten clases, están acostumbrados a enseñar como «la vieja escuela», mediante un pizarrón, revisión de cuadernos, donde pueda haber una retroalimentación con los alumnos, por lo que comprenden que debido a la situación, muchos de ellos no comprenden las nuevas tecnologías y cómo deberían ser implementadas las clases; sin embargo, sus preocupaciones llegan por que sienten que el examen de admisión a la educación superior está a la vuelta de la esquina, donde aseguran que la situación de la pandemia seguirá por un tiempo indeterminado, por lo que buscan lo mejor para sus hijos, pero no consideran correcto que estén pasando más horas frente a una computadora, televisión o cualquier aparato electrónico, que cuando acudían a clases presenciales.