“Judas” se salvan; suspenden tradicional quema

Los “Judas” se salvaron de ser quemados en gran parte de la Ciudad de México, así como en algunos estados de la República Mexicana, debido a que la práctica de esta tradición fue cancelada como medida sanitaria para evitar la propagación del coronavirus en el país, ya que esta actividad suele congregar a mucha gente.

Uno de los primeros lugares en suspender la tradicional quema de Judas fue el Museo Dolores Olmedo, ubicado en la alcaldía de Xochimilco, Ciudad de México, al cancelar todas sus actividades artísticas y recreaciones, desde el pasado 20 de marzo. El Museo Dolores Olmedo, elaboraba desde hace más de 10 años la tradicional quema de Judas en Sábado de Gloria, como parte de las actividades de Semana Santa .

El recinto informó mediante carteles a todos los pobladores del lugar, la cancelación de programa de Carnaval de Tradiciones, que incluye este evento, la exhibición del Altar de Dolores, la visita a la colección legada por Diego Rivera.

En algunas zonas del Estado de México también se cancelaron las quemas de Judas, entre ellas las de la Plaza de los Martínez de Toluca, donde cada año se realiza una convocatoria entre los municipios de Almoloya de Juárez, Tultepec, Metepec, Texcoco, Amecameca, Ozumba, y se queman aproximadamente 150 Judas.

La suspensión de este evento se determinó después de que el Gobierno del Estado de México, a través de la Secretaría de Cultura y Deporte, informara que esta actividad, entre otras, quedaban canceladas hasta el próximo año, con el fin de continuar con las medidas prevención.

Otro lugar que anunció la cancelación de la quema de Judas fue la región de San Martín Texmelucan, en el estado de Puebla. Este anuncio fue dado a conocer por la Comisión de la quema de Judas en la Villa del Carmen en Texmelucan.

La región de San Martín es una de las más concurridas y también lleva a cabo una representación de la Pasión y muerte de Cristo, las cuales también fueron canceladas por la contingencia del Covid-19.

La quema de Judas es una tradición ligada a la evangelización católica, que representa el final del mal en la tierra. A la figura del Judas, quien fue el traidor de Cristo, se le ponen cuernos o rostros de figuras impopulares de México como por ejemplo políticos o gobernantes. Acto siguiente se prenden los fuegos artificiales que tiene dentro para que se queme.

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