Mercados ya contemplan acciones por posible depresión

De acuerdo con la agencia internacional Reuters, las ondas de choque del coronavirus que se agitan en las acciones estadounidenses están obligando a los inversores a contemplar resultados más graves que una recesión, incluyendo varios trimestres de actividad económica en declive, una crisis crediticia o incluso una depresión.

Las consecuencias financieras de la pandemia son examinadas por inversores y economistas ante el panorama creciente de víctimas mundiales y la incertidumbre sobre hasta qué punto se extenderá incluido el panorama de una depresión.

«Parece que este mercado ya tiene un precio en la mayor parte de una recesión… Ahora se suma a eso tener que fijar el precio con cierta probabilidad de una crisis crediticia», dijo Frances Donald, economista jefe global de Manulife Investment Management.

Pronosticadores de Goldman Sachs y bancos a nivel mundial han proyectado una fuerte contracción económica en al menos el segundo trimestre a medida que los gobiernos de Estados Unidos y Europa comienzan a cerrar restaurantes, cerrar escuelas y pedir a los ciudadanos que se queden en casa.

Este lunes las acciones se derrumbaron nuevamente luego de que la Reserva Federal tomara medidas de emergencia diseñadas para amortiguar la economía, utilizando herramientas similares a las que desplegó el banco central para ayudar al país a salir de la crisis financiera de 2007-2009.

El economista jefe de mercado de Spartan Capital Securities, Peter Cardillo, aseguró que la reacción del mercado este lunes tras las medidas de la Reserva Federal es «una señal de colapso total de la confianza».

Después de la acción de la Reserva Federal, el enfoque de Wall Street ahora está en qué políticas fiscales promulgarán los gobiernos, y aún más, en lo que se puede hacer para contener el virus.

«Nada más importa si no podemos tener esto bajo control», dijo Eric Winograd, economista jefe de Estados Unidos en AllianceBernstein.

Sin embargo, Winograd dijo que le preocupaba que la situación pudiera convertirse en una «recesión duradera» que se deriva en parte de la angustia en el sector bancario.

«Si terminamos en un descenso en el nivel de varios trimestres, esperaría que todavía haya una desventaja significativa para el mercado», detalló.

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