Sí bajó saturación de oxígeno de Trump pero mejora, reporta su equipo médico

Sean P. Conley, médico de Donald Trump, mencionó que el estado de salud del presidente estadounidense ha mejorad pero confirmó que su saturación de oxígeno ha fluctuado por debajo del 94% por algunos momentos, por lo que se le ha suministrado un par de medicamentos luego de evaluar los riesgos y beneficios.

En conferencia de prensa, Sean P. Conley informó que Donald Trump se ha mantenido sin fiebre a causa del Covid-19, siendo la última vez que ello ocurrió el pasado viernes. Este dijo que, como cualquier enfermedad, el caso del presidente de Estados Unidos ha tenido altibajos, presentando 2 episodios de fluctuación de la saturación de oxígeno.

La primera baja de oxígeno del presidente ocurrió el viernes por la mañana, bajando a 94% cuando presentó un cuadro de fiebre. Sin embargo, minutos después se recuperó y su saturación subió por arriba del 95%, pasando toda la tarde sin mayores variaciones pese a estar en movimiento hasta que fue trasladado al Walter Reed Hospital.

El médico detalló que ayer Trump tuvo otro episodio donde su saturación de oxígeno estuvo por debajo de 93%, aunque ello no implicó que el presidente sintiera una deficiencia respiratoria. Ante esa cifra, el equipo de médicos que lo atiende estuvo observando una posterior normalización.

De acuerdo con Conley, fue cuando se debatió el uso de dexametasona, considerando que en el presidente su uso podía tener un beneficio potencial mayor que cualquier riesgo. Aun así, el doctor Sean Dooley informó que se continúa monitoreando su ritmo cardiaco, el hígado y su riñón, órganos que no han presentado alguna disfuncionalidad o resultado fuera de lo normal.

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Al momento, el presidente no ha requerido de oxigenación desde el pasado viernes.

Finalmente, el médico Brian Garibaldi, de la Universidad Johns Hopkins, informó que el presidente ha terminado hasta hoy una segunda dosis de Remdesivir sin que haya algún efecto secundario contraproducente en su persona. Hasta ahora, el plan es continuar con sus cuidados recibiendo sus alimentos e hidratándolo, considerando la posibilidad de darle de alta mañana para que continúe con su tratamiento en la Casa Blanca si continúa sintiéndose bien.