“Morena tiene una plataforma criminal”, señalan ultras por defensa de derechos de mujeres y LGBTTTIQ

El partido Morena fue criticado por ponentes de la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC), reunión internacional de ultraconservadores realiza por segunda ocasión en Ciudad de México (CDMX). Esto denunciando tanto atentados contra derechos religiosos como reclamando el reconocimiento de otros para la comunidad LGBTTTIQ y las mujeres, señalándolos con contradictorios.

Durante su participación, el argentino Pablo Muñoz Iturrieta dijo que hoy se están enmascarando una serie de atrocidades como derechos humanos. Asimismo, expresó que ha observado que la misma política se ha convertido en una carrera por la conquista de esos derechos, ya que el político fundamenta su campaña en ellos para satisfacer a personas.

“Veamos algunos ejemplos de la campaña de Claudia Sheinbaum, todo absolutamente centrado en la satisfacción de todos estos nuevos derechos: la diversidad sexual, los derechos a la violencia mientras promulga leyes que tienden a violentar y asesinar niñas”, pronunció el ponente.

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Adicionalmente, calificó a la plataforma política de Morena como “criminal” por defender “cuestiones irracionales” como el aborto, acusando que quienes lo defienden afirman que no se trata de un homicidio sino de autonomía corporal. Asimismo, dijo que aquellos que se atreven a defender a la comunidad LGBTTTIQ no tiene problema de destruir el cuerpo de menores de edad permitiéndoles operarse para ello.

“¿Cómo podemos celebrar esto como un derecho humano? ¿A qué nivel hemos llegado donde políticos aquí en México sostienen eso como su bandera de campaña? Y todos [los de] la masa [van] como tontos van a votar la plataforma de Morena que es una plataforma criminal”, apuntó recibiendo aplausos de los presentes.

Por su parte, Rodrigo Iván Cortés, presidente de Frente Nacional por la Familia, criticó que el diputado local de Campeche Héctor Malavé, de Morena, asegurando que quería restringir y cancelar libertades fundamentales mediante la Ley de Violencia Simbólica, dado que la redactó basándose en teorías del italiano Antonio Gramsci. Al respecto, mencionó que este autor decía que había que decapitar a Dios de la plaza pública y extirparlo de la conciencia de las personas.

Finalmente, criticó que fuera juzgado, sentenciado y castigado por decir que “un hombre es un hombre y una mujer es una mujer” en la Cámara de Diputados. Según indicó, ello lo expresó contra una iniciativa pretendía criminalizar predicar la biblia catalogando enseñanzas cristianas sobre la familia como un discurso.