Lanza “bomba” Musk: Trump está en los archivos de Epstein; se volvió loco, revira el republicano

Se agudiza agarrón entre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y su exasesor Elon Musk, antes aliados inseparables. A través de redes sociales los líderes mundiales, el mandatario estadounidense y el hombre más rico del mundo, han comenzado una batalla de declaraciones que de inmediato puso nerviosos a los mercados dejando como saldo un desplome de 14 por ciento de las acciones de Tesla, la empresa de autos eléctricos de Musk.

En los ataques iniciados por el desacuerdo de Musk ante la política presupuestaria del presidente de Estados Unidos.

En redes sociales, el empresario acusó al presidente de estar en la lista de Jeffrey Epstein, señalado de liderar una red de pederastas, motivo por el cual asegura no se ha dado a conocer quienes la integran. Está noticia dijo que era “la gran bomba”.

Además, continuó posteando mensajes, uno de ellos con un video donde se ve a Trump acompañado de Epstein, platicando mientras ven a mujeres jóvenes, aunque no menores de edad.

A estas publicaciones también se sumaron otras en las que acusa al mandatario de que debido a sus aranceles en la segunda mitad del año Estados Unidos vivirá una recesión.

Ante todo ello, el presidente estadounidense respondió a la mayoría de posteos afirmando que su excercano y asesor se había vuelto “loco”, pese a que ya conocía la iniciativa de política presupuestaria.

“Elon estaba ‘agotándose’, le pedí que se fuera, le quité su Mandato de Vehículos Eléctricos que obligaba a todos a comprar autos eléctricos que nadie más quería (¡eso que él sabía desde hacía meses que iba a hacer!), ¡y simplemente se volvió LOCO!”, sostuvo.

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Después agrego que no le importaba todo lo que dijera Elon Musk porque su iniciativa era más importante por el bienestar de los estadounidenses, porque de no aprobarla los legisladores habrá un aumento importante de impuestos.

“No me importa que Elon se vuelva en mi contra, pero debería haberlo hecho hace meses. Este es uno de los proyectos de ley más importantes jamás presentados en el Congreso. Implica un recorte récord de gastos, 1,6 billones de dólares, y la mayor reducción de impuestos jamás otorgada. Si no se aprueba, habrá un aumento de impuestos del 68%, y cosas mucho peores. Yo no he creado este desastre, solo estoy aquí para ARREGLARLO. Esto pone a nuestro país en el camino de la grandeza. ¡HAGAMOS QUE ESTADOS UNIDOS VUELVA A SER GRANDE!”, subrayó.

Pero después, a la luz de su enojo, anunció que cancelaba los contratos con Space, empresa aeroespacial de Musk y de Tesla. “La manera más fácil de ahorrar miles de millones de dólares en nuestro presupuesto es cancelar los subsidios y contratos gubernamentales de Elon. ¡Siempre me sorprendió que Biden no lo hiciera!”.

Ante ello, el multimillonario respondió que comenzaría a desmantelar la nave espacial Dragon, una cápsula espacial utilizada para llevar astronautas y suministros a la Estación Espacial Internacional.

“A la luz de la declaración del Presidente sobre la cancelación de mis contratos gubernamentales, Space comenzará a desmantelar su nave espacial Dragón de inmediato”, amenazó.

Las pérdidas millonarias que representó para Musk la pelea con su exaliado se calculan en 34 mil millones de dólares, según los cálculos de Bloomberg.

Al final, el dueño de X lanzó una encuesta en su red social sobre si era “el momento de crear un nuevo partido político en Estados Unidos que realmente represente» a los americanos del centro. Hasta el momento lleva 3 millones 552 mil 213 votos con una ventaja arrolladora de 81 por ciento por el ‘sí’ y solo el 18 por ciento que ha votado por el ‘no’.