Existen los héroes…sí, los de Laura

En una ciudad en la que millones de personas salen a diario de sus casas rumbo al trabajo, a la escuela o hacer cualquier otra actividad con el temor de ser asaltado, agredido o ya no regresar a su hogar, resulta esperanzador lo que vivió Laura, una joven madre que fue amenazada con un cuchillo, despojada de su monedero y que vivió momentos de angustia que la llevaron a arriesgarse a ser atropellada antes que perecer a manos del criminal.

La Hoguera recibió la siguiente historia que da esperanza a miles de personas que piensan que todos los ciudadanos se han vuelto insensibles y que los policías no hacen nada por dar seguridad a los habitantes de la megaurbe.

Laura relata: “Existen los héroes… Sí, los míos. Cuántas veces no decidimos o escuchamos cosas como ‘la seguridad pública no es de fiar’ o ‘la gente no se mete por miedo’… Después de llevar viviendo 30 años en esta hermosa y caótica ciudad la noche 6 de septiembre, cerca de las 22:15 horas, fui víctima por primera vez en mi vida de la delincuencia. Cosa que jamás pensé que me pasaría.

“Terminé mi turno en el trabajo (en Bosques de Las Lomas) y mientras me dirigía a mi casa, la cual se ubica al sur de la ciudad, cuando me encontraba a la altura de la carretera México-Toluca y prolongación Carlos Echenove fui intersectada por un hombre de aproximadamente 1.80 metros de altura, de unos 80 kilos, quien después fue identificado como Rubén Jiménez Vidal, de 32 años.

“Lo primero que vi después de hacer contacto visual con el sujeto fue el cuchillo que portaba en la mano izquierda. Se dice que estas cosas pasan muy rápido, pues así fue. Lo que más recuerdo fue el frío que sentí en todo el cuerpo y verlo delante de mí apuntando su cuchillo hacia mi pecho, algo en mí, no se qué fue, me hizo lanzarme frente a un automóvil que pasaba en ese momento. Pensé descabelladamente que era mejor ser atropellada que apuñalada y fue entonces, para mi fortuna, que mi primer héroe entró en acción: Alejandro Dimas Cruz, un hombre de 44 años, quien me rescató al subirme a su auto.

“El hombre trató de calmarme y manejó hasta encontrar al segundo héroe, Jorge Molina Tapía (elemento de seguridad pública), quien al escuchar los sucedido salió corriendo tras la persona que me asaltó. Qué por qué les digo héroes. Lo digo porque ambos arriesgaron sus vidas, ya que fueron agredidos físicamente y en dos ocasiones casi los arrolla un carro tratando de capturar al asaltante, pues todo esto se dio en medio de la carretera México-Toluca…

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“Finalmente lo capturaron y estoy inmensamente agradecida con esos dos hombres, pues de no haber sido por ellos no sé qué hubiese pasado. Lo sucedido me hizo revalorar el trabajo de los policías, que a diario exponen sus vidas, y a confiar en que no todos los ciudadanos se hacen de la ‘vista gorda’ y huyen cuando alguien les pide ayuda. Sí, hay ciudadanos que van más allá de auxiliarte y policías que cumplen con su deber.

“En esta terrible experiencia también conté con el apoyo de otras personas que me ayudaron y gracias a las cuales pude regresar con bien a mi casa, con mis pequeños hijos. Entre las personas que me atendieron está el comandante Alejandro (no recuerdo su apellido), quien me hizo sentir súper segura, y en todo momento los funcionarios del Ministerio Público, quienes me explicaron detalladamente mis derechos, siempre atentos, como el licenciado Iván González Nolasco, quien tomó mi declaración.

“La fortuna de haber encontrado al amable y valiente automovilista, así como al agente de policía, en verdad me demostraron que no todo lo que se dice es verdad. Exhorto a quienes conozcan esta historia a hacer un cambio, a no ignorar a alguien cuando pide auxilio y a recobrar la confianza en los policías.”