Ebrard espera que EU responda a México petición de anular aranceles al acero y aluminio

El secretario de Economía, Marcelo Ebrard Casaubón, informó que espera que esta semana Estados Unidos de América dé a México una respuesta a su petición de eliminar los aranceles del 50% al acero y aluminio exportados hacia ese país. Esto al considerar que ello es viable dado que tendría efectos nocivos no solo para la economía mexicana, sino también para la estadounidense en varios ramos.

En entrevista radiofónica, Marcelo Ebrard comentó que la semana pasada expuso ante autoridades de Estados Unidos que no era conveniente mantener los aranceles al acero y aluminio para México, dado que ellos tienen un superávit en ese intercambio de metales. Asimismo, dijo a Radiofórmula que eso sería viable dado que el gobierno trumpista alcanzó un acuerdo de exclusión en favor de Reino Unido a cambio de ajustes a una acerara de su país, con el fin de que la mayoría de las acciones fueran británicas y no chinas.

Al respecto, mencionó a Ciro Gómez Leyva que espera que el país vecino le conteste al nuestro durante la presente semana sobre su solicitud de que se eliminen por completo los gravámenes para ambos metales exportados a suelo estadounidense. En tanto, mencionó que de no ser así, seguramente será un tema a tratarse en el G7, al que acudirá la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo.

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Respecto a los efectos, el excanciller comentó que México sufriría en términos de empleos y se estaría pasando por alto algunos acuerdos hechos con la primera administración Trump que incluso derivaron en inversiones en el territorio. En tanto, dijo que del otro lado de la frontera impactaría a los ramos de la construcción, aeronáutica y automotriz, dado que el país importa el 25% de todo el acero que necesita.

A la par, Marcelo Ebrard advirtió a Estados Unidos que lo que sucederá es que terminará haciendo diversas negociaciones bilaterales «muy difíciles» con los países exportadores y llegarán a diferentes acuerdos. No obstante, apuntó que si esto no ocurre, entonces el mundo terminará acudiendo a la misma lógica trumpista de la reciprocidad y gravará al acero y aluminio estadounidenses.

Finalmente, el secretario de Economía confió en que México tiene ventajas para salir airoso de esta situación. Sin embargo, insistió en que existe el riesgo de que esto genere que el costo de las empresas estadounidense sea más grande y provoque daños a industrias y actividades económicas.