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Boca Juniors y River Plate se juegan algo más que la Copa

Foto: Especial

Boca Juniors y River Plate se roban la atención del mundo entero este fin de semana. Argentina, en medio de la crisis de volatilidad de su moneda local se ve desbordado por la pasión del futbol una vez más por el duelo final por la Copa Libertadores. Comúnmente es América la que vuelve la vista a Europa, pero en esta ocasión es al revés, muestra de ello es el Diario Marca que dedica por completo su portada principal al Clásico Argentino antes que al inicio de la jornada 12 de La Liga, mientras que diarios como AS o Mundo Deportivo le dedican varios artículos sobre todo a la historia y contexto que rodea a esta final.

El clásico argentino cumplió este año 87 años, pero es la primera vez que disputan un duelo en esa instancia de la copa más importante de América, a nivel de clubes. En lo deportivo, la actualidad de ambos clubes no es la mejor, ya que en la ‘Superliga Argentina’, Boca Juniors ocupa la octava posición, ocho puntos debajo del líder de la tabla general, y River Plate la décima, apenas dos puntos debajo del club xeneize.

No obstante, ambos clubes se han impuesto a clubes de toda sudamérica para llegar a esas instancias y nadie niega su “grandeza”. Boca Juniors es el equipo con mayor cantidad de finales disputadas para la obtención de esta copa, aunque solo se ha hecho de ella en seis ocasiones, siendo su último título en 2007; por su parte, River Plate ha disputado la final 5 veces y ha ganado en tres ocasiones, siendo su último triunfo en la edición de 2015 cuando enfrentó al equipo mexicano Tigres.

La mirada hacia esta final argentina se debe también a la cantidad y calidad de jugadores de este país que ejercen en las ligas del viejo continente. Empezando por Lionel Messi, el mejor jugador de la liga española. Europa beneficia su espectáculo con goleadores en Italia como Higuain (Juventus) e Icardi (Inter de Milán), así como en la Premier League con Sergio Agüero (Manchester City), todos ellos, en equipos que terminan siendo campeones o en puestos que otorgan la entrada a torneos internacionales de clubes.

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La historia reciente agrega otro elemento que llama la atención y se ubica en la delgada línea entre el miedo y el morbo: la “pasión”. Mientras en países pertenecientes a la CONCACAF (Norteamérica, Centromérica y Caribe) y UEFA (Europa) se ha intentado que el público siga siendo en su mayoría familias, que se limite la entrada con distintos tipos de objetos y encapsular a “porras” o formalizándolas para tener un completo control sobre ellas que permita castigar un mal o violento comportamiento, en Argentina se hizo una particularidad y un elemento normalizado.

Los cánticos generalizados, verdaderos himnos de guerra que buscan herir el orgullo del rival, las bengalas y papeles tirados a la cancha, llaman la atención de propios y extraños. Contagian y motivan, pero todo el contexto se transforma cuando se piensa que solo uno de ambos equipos resultará ganador, lo cual valdrá para burlas que durará por un largo tiempo. Mauricio Macri, Presidente de Argentina y ex Presidente de Boca Juniors de 1995-2007, ha declarado «el que pierde va a tardar 20 años en recuperarse».

Es por eso que el gobierno señaló que, para evitar cualquier tipo de disturbios, implementará un operativo con más de 2000 elementos. Desde el mismo Ministerio de Seguridad de Argentina, el Jefe de Gabinete, Gerardo Milman, ha pedido a los aficionados que no se acerquen a las inmediaciones del estadio si no cuentan con tickets y mejor lo miren por televisión. Otro elemento a destacar es que, pese a poder ser un evento masivo que deja derrama económica, hasta el momento no se reportan la instalación de televisiones en plazas públicas.

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Mauricio Macri se pronunció a favor de permitir a los hinchas visitantes en las canchas donde se disputarían, pero se decidió finalmente que no fuera así para disminuir el riesgo de enfrentamientos violentos entre «barras», sin embargo, deberán ser efectivos los operativos dentro y fuera de los estadios, para evitar que los jugadores visitantes sufran agresiones como cuando hinchas de Boca Juniors lanzaron gas pimienta a los futbolistas de River o peor aún, una tragedia como la del incidente en la Puerta 12  hace 50 años, en donde fallecieron 71 aficionados de Boca Juniors aplastados al intentar salir del estadio de River Plate. Los ojos del mundo estarán sobre Argentina, esperan ver espectáculo y pasión, pero no tragedia.

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