Anuncia AMLO reestructuración de la deuda externa para heredar un gobierno sin presiones

El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) anunció que su gobierno hizo una reestructuración de la deuda externa a fin de poder heredar a su sucesora o sucesor una administración sin presiones financieras. Esto en contraste a lo ocurrido en la transición de la presidencia de Carlos Salinas de Gortari a la de Ernesto Zedillo Ponce de León.

Desde Palacio Nacional, AMLO dijo que él ya no está pensando solamente en cómo terminar su sexenio, pues está seguro de que terminará bien, sino que está ocupado en cómo dejarle al siguiente una holgura para actuar. Por eso, anunció que ya realizó una reestructuración de deuda para que en el 2025 el gobierno que llegue pague la mitad de intereses de deuda externa que su administración pagó al inicio del periodo gubernamental.

“Ya reestructuramos deuda para que el 25 no tengan presiones de pago de intereses de deuda. Un día de estos le voy a pedir al secretario de Hacienda que se los explique, porque ya no es sólo el año que viene y el 24, no, que el 25 no tengan presiones financieras”, dijo López Obrador en su ‘mañanera’.

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El mandatario comentó que en su gobierno están actuando de manera muy responsable en ese sentido, pues ya tienen resuelto financieramente todo lo pendiente hasta 2024. No obstante, afirmó que ya están pensando en lo transexenal y es por ello que le acaba de enviar la confirmación de la reestructuración el secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O.

AMLO insistió en que el gobierno va bien en lo económico. Sin embargo, reflexionó que para él lo mejor es que la población tenga salud, dado que la reciente pandemia por la Covid-19 permitió ver cuál vulnerable es la gente. “Lo más importante es la vida y eso depende de la naturaleza y de la ciencia, y del Creador, porque aquí podemos estar hablando de que nos va a ir muy bien, y no tenemos la vida comprada”, dijo.

Finalmente, el presidente de la República contrastó esto con la transición de Carlos Salinas de Gortari a Ernesto Zedillo Ponce de León, quien heredó una “economía prendida de alfileres”. Cabe recordar que a finales de 1994, tras la toma de protesta del último presidente del siglo XX, hubo una crisis económica derivada de su decisión de anunciar una devaluación del peso mexicano, lo cual provocó la salida de inversiones, falta de reservas internacionales y golpes a quienes tenían deudas en dólares.

Dicha situación fue considerada por los zedillistas como consecuencia de una devaluación tardía que debió hacerse en el sexenio anterior; en tanto, los salinistas acusaron que la crisis económica se trató de un error político del presidente entrante.