“Abiertamente homosexual”, se define aspirante a candidata independiente a la CDMX

En 2016, Lucía Riojas tocaba la batería en el Vive Latino para una banda de rock. Hoy, el escenario es distinto. La energía que inyectaba en sus baquetas ahora causa eco como aspirante a candidata independiente por la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México.

Participará a través del movimiento “Ahora”, del que también forma parte Emilio Álvarez Icaza. Comunicóloga, de Cuajimalpa, de 29 años que necesitará alrededor de 75 mil firmas ciudadanas que representa al 1% del listado nominal de la CDMX.

¿Quién es Lucía Riojas?
Soy una persona en la que se puede confiar. Me llevo bien con mi familia. Abiertamente homosexual. Feminista. Procuro ser sencilla, entre menos necesite mejor. No me considero una persona ambiciosa por cosas materiales. Soy desapegada de las cosas que la sociedad ha significado como importantes: el dinero, los estándares de belleza; no me hacen click, nunca lo han hecho. Toda mi vida he estado cercana a luchas sociales. Mis padres son personas muy comprometidas con la sociedad y desde ahí, ha sido muy natural mi proceso de empatía y consideración hacia otros, hacia la comunidad.

¿Cómo te defines ideológicamente?
Mi lado preferido es el izquierdo, pero la discusión política trasciende esas coordenadas. Las distinciones políticas deben radicar en el interés de la gente, en la ciudad y los espacios que compartimos. Me defino como una persona que le interesa su entorno, que se preocupa por los demás, los conozca o no. Que quiere contribuir a una transformación democrática en la ciudad, que se escuche a la gente. La posibilidad de un gobierno donde la base sea el interés de las personas, lo que están viviendo, padeciendo y disputando. Tomar a todos en cuenta para la construcción de políticas públicas.

Tienes la experiencia de participar en movimientos sociales, ¿es suficiente para gobernar la capital mexicana?
No busco gobernar sola. Es momento de concebir la política de manera distinta y no pensar que todo se va a solucionar por una sola persona. Hay que preguntarnos entre todos cómo queremos una ciudad. Sí, hacia la colectividad, a reconocernos dentro de nuestras de diversidades, diferencias y trascenderlas para construir un mejor espacio. Una ciudad vivible, digna y sin miedo. Participé en el movimiento #YoSoy132, llevo un rato trabajando en Ahora. Queremos contribuir, y hablo en plural porque así lo estamos haciendo, en un programa de gobierno colaborativo para caminar juntas y juntos.

Llevas siete meses participando en «Ahora», ¿en qué momento se declinaron por ti?
En «Ahora» no creemos en los dedazos, ni en mesías, ni en candidaturas unipersonales. Empecé en el área de comunicación. Apoyé en unas investigaciones periodísticas sobre el financiamiento ilegal a campañas partidistas, durante el proceso electoral del Estado de México. En Ahora, hay un órgano: el Consejo Promotor de la Ciudad de México, se discutió la posibilidad de presentar una candidatura a la jefatura de gobierno y un conjunto más al congreso local. El movimiento pasó por un periodo de reflexión sobre las candidaturas, la metodología y ahí se deliberó.

En algún momento titubeaste, ¿tuviste miedo por tomar esta responsabilidad?
Más allá del reto y la responsabilidad, fue la impresión de saber que estaba en el momento correcto y acompañada de las personas correctas. Son tiempos distintos, viviremos elecciones donde la gente se involucrará con distintos procesos como recolección de firmas para independientes. La propia autoridad electoral tendrá nuevos retos. Es un momento histórico para el país. Formar parte de él es un privilegio que valoro y que respetaré de principio a fin. Está todo, ahora hay que chambear.

¿La figura de “independiente” se ha desgastado con personajes como Margarita Zavala o El Bronco?
Esas personas ya se encargaron de secuestrar la boleta, los partidos, la confianza, la representación ciudadana. No podemos dejar que también secuestren la figura de candidato independiente. Hay que demostrar que no sólo existen las Margarita Zavala o los Armando Ríos, dejar claro que también están los Kumamoto, las Susana Ocho, los Emilio Álvarez Icaza.

¿Cuál es el mayor reto de juntar las 74 mil firmas para la candidatura?
Atravesamos por una crisis de confianza a nivel nacional donde ya no creemos en un policía y mucho menos en el presidente. No hemos tenido un proceso pedagógico para saber realmente qué es una candidatura independiente. Mucha gente se confunde y más con figuras como El Bronco porque te remiten a todo lo contrario. El mayor reto es que aprendamos qué significa darle tu apoyo a una persona independiente; muchos conciben ese apoyo ciudadano con el voto, pero no es así. Recabar firmas es conocer a las personas, sus necesidades. El reto es que la gente se atreva a creer en ti para que aparezcas en la boleta. Una figura verdaderamente independiente y ciudadana, no un político que se salió de su partido.

Siendo tan joven, ¿cómo te vincularas con personas que rondan la tercera edad?
Hay un momento en el que las generaciones se unen. Los jóvenes somos una generación activa, cuestionamos nuestra realidad, tenemos ganas de cambiar las cosas pero no hay por dónde; hay falta de oportunidades y por lo tanto falta de representación. Mientras que los adultos, cuántos presidentes han visto pasar y ya no confían en ninguno de ellos. Es ahí donde las generaciones se encuentran. Ahora es un proyecto que cree en la apertura, apuesta a que la gente se apropie de él, lo florezca, lo haga representativo y llene el vacío de las generaciones.

No seré una candidata OHL

¿Qué te diferencia de los políticos?
Creo en la horizontalidad, en la colectividad y la diversidad. No me da miedo decir lo que pienso, ni decir las cosas por su nombre. No le debo nada a nadie. No estoy dispuesta a negociar mis ideas. No soy una candidata de OHL, ni de Higa, ni de Odebrecht.

¿Qué opinas de la legalización de la mariguana para uso recreativo?
Me parece un buen camino. Las drogas se deben de atender cómo un problema de salud pública y no de seguridad. Nuestro país lleva más de 10 años de guerra por ese conflicto. Cuántos muertos y desaparecidos. Es momento de abrirnos a otras posibilidades de cómo atender el fenómeno.

Dice Mancera que no existen cárteles en la CDMX, ¿estás de acuerdo con él?
No. Lo vimos en Tláhuac. Hasta hace unos años en la Ciudad de México te sentías como en una burbuja, aislado de la violencia del norte, ya no es así. Sí creo que hay crimen organizado en la ciudad, el Estado está completamente rebasado. A balazos, tratando de militarizar el país o la comunidad no se pueden resolver las cosas.

El jefe de Gobierno de la Ciudad de México gana alrededor de 73 mil pesos mensuales ¿es necesario?
Es mucho dinero. Una persona que se dice representante de la gente no puede ser distinto a ellos. En ese sentido, el sueldo, te coloca en un lugar lejano a la comunidad que representas.

Lucía Riojas participará a través del movimiento “Ahora”