Buscan mayor castigo a quienes alienten cambiar orientación sexual de menores

El diputado Germán Ernesto Ralis Cumplido, del partido Movimiento Ciudadano, presentó una iniciativa que busca prohibir terapias de cualquier tipo que busquen ofrecer servicios o tratamientos que pretendan cambiar la orientación sexual de las personas.

Ralis Cumplido aseguró que con la modificación al artículo 149 Quáter (sic) del Código Penal Federal se podrá sancionar desde uno a tres años de prisión a profesionales de la salud que incurran en estas prácticas y se les suspenderá el ejercicio de su profesión hasta por tres años.

La misma pena será otorgada a toda persona que «imparta, aplique, obligue, induzca o someta a tratamiento, terapia o cualquier tipo de servicio que pretenda cambiar la orientación sexual de un tercero», se detalla en un comunicado.

Asimismo, se impondrá una doble sanción, esto es de dos a seis años de prisión, al padre, madre o personas que estén bajo guarda, custodia o tutela de un menor de dieciocho años y que lo sometan a tratamientos, servicios o terapias que pretendan cambiar su orientación sexual. Cabe destacar que se privará de los derechos de patria potestad, tutela o custodia a quienes cometan este delito.

“Desde que se consideró a la homosexualidad como una enfermedad, los tratamientos para tratar de cambiar la orientación sexual de las personas han sido inhumanos y violatorios de sus derechos”, subrayó el legislador.

Ergo, resaltó que, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), investigadores y especialistas concluyeron que la homosexualidad no es una enfermedad, sino una variación natural de la sexualidad humana.

• ¿Por qué la reforma?

La reforma se da en una coyuntura donde, aunque la homosexualidad no es una patología mental, emocional, biológica o de cualquier otro tipo, existen una amplia gama de clínicas a lo largo y ancho del territorio nacional que ofrecen terapias donde se asegura que se logra cambiar la orientación sexual y se violan los derechos humanos de los homosexuales.

“Estas terapias llevan por nombre reorientación o de conversión sexual, las cuales son completamente ilegales, pues van en contra de la libertad del ser humano”, especificó el diputado.

En este mismo sentido enfatizó que dichos métodos de cura van desde el suministro de hormonas, violación, relaciones sexuales forzadas con los trabajadores de los centros, aversión sexual, castración, palizas, retención de alimentos, hasta electrochoques y terapias psicológicas; así como también las personas homosexuales ingresan en contra de su voluntad, drogadas o secuestradas por sus propios familiares.

Ante este escenario, “las personas lesbianas, gays, bisexuales, trans e intersex han estado históricamente sometidas a discriminación por su orientación sexual y sujetas a violencia, persecución, lo que vulnera sus garantías individuales”, detalló la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).

Ralis Cumplido aseguró que, de aprobarse la iniciativa, se garantizaría el respeto de los derechos humanos de los grupos de diversidad sexual, pues éstos se encuentran en un nivel de desigualdad notorio.