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Nación

Encabeza Nuño ofensiva contra AMLO

Foto: Cuartoscuro/Archivo

A principios del pasado diciembre, Aurelio Nuño Meyer, entonces titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), anunció su salida de la dependencia, dejando en el puesto al hasta entonces subsecretario Otto Granados Roldán. Se incorporaría como coordinador de la campaña por la Presidencia de José Antonio Meade.

De inmediato, Andrés Manuel López Obrador cuestionó el movimiento en el gabinete del presidente Enrique Peña Nieto, como una muestra del poco interés por el sector educativo del país y más en pleno proceso de reconstrucción de escuelas tras los sismos de septiembre. La crítica del precandidato opositor sólo fue preámbulo de la confrontación que se desataría entre estos actores.

De entonces a la fecha, el ahora ex secretario, ya desde su nuevo papel dentro del equipo de campaña de Meade, se ha convertido en uno de los principales críticos a López Obrador.

Un día sí y otro también, en todo espacio posible, entrevistas en radio, TV, prensa escrita y redes sociales, el secretario de Educación cuestiona las diferentes posturas del precandidato de Morena. Ya que se  hable de seguridad, educación, economía, la descalificación pronta es de parte de Aurelio Nuño.

Nuño ha acusado al precandidato de la coalición Juntos Haremos Historia, que integran Morena, PT y PES, de, entre otras cosas de traicionar a la patria, de tener sólo ocurrencias en el terreno de la seguridad, de aliarse con Elba Esther Gordillo, ex lideresa del SNTE, de querer pactar con el crimen organizado.

 

 

 

Tal ha sido el protagonismo de Nuño, que el propio López Obrador ha respondido a esta ofensiva con la versión de que como la campaña de Meade “no levanta”, en el PRI ven en el ex titular de Educación Pública al personaje idóneo para relevarlo y evitar una catástrofe electoral en los comicios del 1 de julio.

En otra muestra de esta confrontación, AMLO cuestionó la cercanía de Nuño con Fernando Bribiesca Sahagún, delegado de la SEP en Guanajuato e hijo de la ex primera dama Marta Sahagún de Fox. A lo que Nuño respondió acusando al tabasqueño de nepotismo porque tres de sus hijos ocupan cargos en la estructura de Morena.

Uno de los últimos capítulos en la confrontación tuvo como protagonista al nuevo titular de la SEP, Otto Granados, que desde su cuenta de Twitter llenó a López Obrador de calificativos: senil, orate, falto de salud mental, de ideas, demagogo e inmoralidad.

 

 

 

La justificación del ex gobernador de Aguascalientes para este arranque: la defensa de la reforma educativa y el futuro de los niños de México.

Si bien la confrontación entre estos dos actores tiene larga data, lo antes expuesto es muestra de que el tono se ha recrudecido.

Ya antes López Obrador había descalificado a Otto Granados por su cercanía con Carlos Salinas de Gortari, de quien fue colaborador durante su gobierno, y señalando de férreo privatizador. De manera sarcástica le recordaba que privatizó hasta la plaza de toros de Aguascalientes, y que ahora en la SEP seguiría vendiendo las plazas… pero de maestros.

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